El hacinamiento de personas privadas de libertad continúa registrándose en las comisarías, según se pudo constatar durante un recorrido de ABC Color en dos sedes policiales del departamento Central. Y si bien el penal de Tacumbú volverá a recibir reclusos, no es suficiente para descomprimir la cantidad de arrestados en los calabozos.
Por ejemplo, en una pequeña celda de 2 m x 2 m de la Comisaría 9ª de Limpio están recluidas 20 personas, confirmó el jefe de dicha dependencia de la Policía, Diosnel Ferreira. Explicó que de esta cantidad apenas tres serán derivadas al penal de Tacumbú, previo test de coronavirus.
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También anunció que construirán un calabozo de 6 m x 4 m, que permitirá descomprimir su único calabozo.
En tanto que la Comisaria 10ª de Mariano Roque Alonso tropieza con el mismo problema. En tres pequeñas celdas de 1 m x 4m están están hacinados 18 presos y de esta cantidad también solo tres serán trasladados a Tacumbú, confirmó el jefe de la sede policial, Rober Rodríguez.
Luego de transcurrir más de un año de la prohibición, la Penitenciaría Nacional de Tacumbú permitirá el ingreso de otros 500 detenidos que se encuentran recluidos en comisarías policiales. Así lo confirmó ayer la ministra de Justicia, Cecilia Pérez Rivas.
La secretaria estatal recordó que la población penal de dicho principal reclusorio del país está rebasada y reconoció que no puede hacerse cargo de los 1.400 detenidos en total que actualmente están en los calabozos de las comisarías y que necesitan ser albergados.
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Pérez Rivas explicó que se establecerán los mecanismos para que aquellas personas que deban ingresar a los penales con prisión preventiva y que siguen arrestadas en las comisarías debido al cierre epidemiológico de las cárceles podrán hacerlo en la brevedad. Además de Tacumbú, se registraron brotes de coronavirus en más cárceles del país.
En la penitenciaría de Ciudad del Este, donde el primer brote se produjo el 22 de junio, hubo 619 contagios confirmados: 525 personas privadas de su libertad y 94 funcionarios, de los cuales fallecieron cuatro (tres funcionarios y un interno).
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En el penal de mujeres de CDE Juana María de Lara se tuvo 28 contagios, siendo estos 23 de internas y cinco de funcionarios. Actualmente, allí se registra un rebrote de la enfermedad.
Sobre la penitenciaría regional de Coronel Oviedo aún no se puede hablar de un levantamiento del cierre epidemiológico porque hay nuevos casos. Similar situación se da en la penitenciaría Esperanza.
En Emboscada, todos los contagiados ya se encuentran recuperados; igualmente en Misiones, pero aún no se dan las condiciones para el levantamiento del cierre. En Villarrica solo se contagiaron dos reclusos y ningún funcionario. Asimismo, se registran nuevos brotes en las cárceles de Concepción, San Pedro y Pedro Juan Caballero.
En resumen, en 13 centros penitenciarios hubo 1.168 casos confirmados, 988 recuperados y siete fallecidos.