La dueña explicó que en mayo se llamó a licitación para el nuevo contrato, pero el procedimiento fue anulado debido a que hubo denuncia de irregularidades en el proceso. “El problema fue con ofertas de otras sedes del Ministerio Público, no con Caazapá”, explicó.
La propietaria dijo que esta situación con la indefinición con su local inclusive afecta a su salud, debido a que es una persona de avanzada edad.
“Se volvió a llamar a licitación en agosto, volvimos a presentar todas las documentaciones, pero ahora no sabemos qué es el problema, debido a que el contrato no firmamos”, dijo.
En otro momento, nuestra entrevistada dijo que le informaron que para cobrar los alquileres en mora, debe presentar una demanda contra la institución.
“Una denuncia que va a costar dinero, por más que aseguran que se van allanar a la demanda, quiero saber por qué no pagan nomás”, indicó, y señaló que ya va por el octavo mes.
Tratamos de hablar con la administradora de la fiscalía de Caazapá, Adela Sarubbi, pero su teléfono celular estaba apagado.