YBY YAÚ (Aldo Javier Rojas, corresponsal). Agentes de la FTC y del departamento Antisecuestro, junto con el Ministerio Público, fueron a inspeccionar el campamento encontrado en esta zona del departamento de Concepción.
En el lugar hallaron en total 14 hamacas, que señalan la cantidad de personas que estaban concentradas en ese espacio, así como armas largas, una de ellas una subametralladora italiana MP-12, que habría sido usada en el secuestro de Arlan Fick, en 2014.
En cuanto a los objetos hallados entre las pertenencias de Osvaldo Villalba, uno de los líderes del grupo criminal, se levantó literatura para francotiradores y relacionadas a estrategias militares.
También se incautó un generador a combustible que no estaba conectado, al igual que panel para energía solar, instalado por un árbol.
Un animal de carga, herido por un proyectil en uno de los muslos, también fue hallado en el sitio. Aparentemente con este trasladaban de un punto a otro el generador, el panel, así como las provistas y otros objetos del campamento.
El Gral. Héctor Grau dijo que hace dos años, en un operativo en Cerro Naranjay, conocido como Cerro Guaraní, colectaron el 20 por ciento de lo en esta oportunidad levantaron. Calificó este campamento como uno de los más completos en los años activos del EPP.
Dólares y guaraníes
En el lugar también se encontró la suma de G. 3 millones y US$ 16.200 en efectivo. El jefe de Antisecuestro, Crio. Nimio Cardozo, señaló que el dinero pudo provenir del pago en un secuestro o por el “impuesto revolucionario”. Si se dio el primer caso, se compararán los billetes con el archivo de la fiscalía, pero si se toma la otra hipótesis ya resultaría difícil de conocer el origen.
Todos estos elementos serán peritados, a fin de saber quién estuvo en el lugar y relacionarlo con cada hamaca y elemento hallado en ese sitio.
Grau agregó que siguen buscando a la gente que pudo resultar herida, con medios tecnológicos y con los perros rastreadores.
Ideologizados desde pequeños
El jefe de Antisecuestro, comisario Nimio Cardozo, aseguró que los líderes y otros miembros del autodenominado EPP ideologizan a integrantes de su núcleo familiar desde niños para que más adelante pasen a engrosar sus filas. En tal sentido enumeró 11 casos de menores de edad que ingresaron al grupo criminal, entre ellos el hoy “comandante” Osvaldo Villalba, quien se enroló al grupo con solo 17 años. Otros ingresaron incluso con 13 años, a la ACA.