González Macchi aseguró hoy en conversación con ABC que el abogado Carmelo Caballero —quien aparece en los audios filtrados transando con Raúl Fernández Lippman— sigue con influencias junto a su socio José Almada para un supuesto esquema extorsivo desde el JEM al llevar a juicio a la jueza Tania Irún por un fallo que les fue desfavorable y que implica a los hermanos Preston y Sean Moon por una deuda de US$ 15 millones relacionada a las tierras de la secta Moon en el Chaco paraguayo.
“Es cierto, el estudio de Carmelo Caballero y José Almada… también se suman dos colegas, Bittar y Dolsa son los apellidos, que están detrás de la negación de un conflicto que tiene que ver con una valiosa cantidad de tierra. Es una suma considerable, bastante. De esa cantidad total, 30.000 hectáreas se donaron al Estado paraguayo. Si 30.000 se donaron es porque sobra muchísimo”, dijo González Macchi. La cantidad total de tierra de acuerdo al archivo de ABC es de más de 400.000 hectáreas.
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El abogado apuntó al diputado liberal Eusebio Alvarenga como el principal promotor en el JEM de Caballero y a Almada porque forma parte de la secta Moon.
“Eusebio Alvarenga tiene relaciones congregacionales, es parte de la congregación. De ahí a que me traiga en su admisión una acusación contra la jueza (Tania Irún), que falló en contra de los intereses de ese grupo, me trae a colación cuestiones que tienen que ver con el precio de la supuesta transacción de la operación de cesión de pagos”, explicó.
González Macchi dijo que ambas partes en litigio (Preston y Sean Moon) eran alguna vez de un solo grupo y que el dinero que uno de ellos prestó para la compra de tierras fue devuelto con las propiedades como dación en pago.
“Está documentado que una empresa que era hermana de la otra —en ese momento era un solo grupo— le presta dinero que tiene del extranjero para que compren las tierras. Luego, cuando no puede pagar la empresa paraguaya (Victoria SA) le devuelve, con dación en pago, las tierras que compró con el dinero que se le prestó. Esa fue la relación comercial. Ahora vienen a decir que el valor de las tierras es muy superior al valor de la transacción y eso… ¿qué tiene que ver?”, detalló González Macchi.
“Alvarenga es el visible, pero el jurado lo conforman ocho... Ocho los que votan. En este caso votaron por la admisión del enjuiciamiento de esta jueza. Yo no sé si existen otras causales de enjuiciamiento, no sé porque no manejo el caso, por este caso, por el fallo en cuestión, por la obligación de hacer escritura pública por dación en pago que concierne al caso secta Moon la admisión fue incorrecta y los argumentos de la admisión fueron incorrectos y en algunos casos hasta falaces, porque falsea datos”, añadió.
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Para el abogado, el JEM “se prostituyó” cuando empezó a tomar denuncias que tienen que ver con la apelación de casos.
“El JEM empezó a prostituirse cuando entraron las camarillas de abogados a litigar a través o con el jurado (…) cambió cuando en aquella época el jurado declaraba inadmisible, es decir, no trataban luego, cualquier cosa que venía luego por una forma de apelación de una decisión tomada por un magistrado. Es decir, para eso están las cámaras de apelación o la Corte Suprema en última instancia, pero cualquier protesta que se quisiera hacer sobre cómo un magistrado sentenció un caso, eso no era admisible por el JEM”, recordó.
Finalmente, dijo que se debe transparentar todo el proceso judicial sobre este conflicto que implica no solo el dinero sino cientos de miles de hectáreas en el Chaco y al tiempo de cuestionar nuevamente la “rosca” que persisten en el JEM y de la que alguna vez fue cabecilla el exsenador Óscar González Daher. “Lo que quiere hacer esta gente (secta Moon) es tener esas tierras para vender al extranjero porque aquí no hay plata que compre esa tierra”, concluyó.