Este martes habló con ABC la senadora y médica Desirée Masi sobre la situación del sistema de salud en el marco de la pandemia de COVID-19 que está empezando a colapsar por el aumento de casos. Puntualizó los problemas existentes en la administración del Ministerio de Salud Pública y al ser consultada con respecto a si el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, debería irse, respondió: “Yo creo que sí, pero eso ya no depende de nosotros (parlamentarios)”. No obstante, aclaró que no se trata de algo personal contra el titular de la estatal.
La legisladora remarcó que desde un primer momento le ha manifestado a Mazzoleni los inconvenientes que se estaban registrando y el escenario que se podría vivir si la estatal no actuaba a tiempo. “Le he dicho absolutamente todo, porque conozco el sistema por dentro y conozco el sistema por fuera y conozco en este momento, casi al detalle, lo que pasa en todos los hospitales. Hubo muchísimas falencias”, expresó.
En ese punto, reconoció que existe una deuda histórica del sistema en general por la falta de camas para terapia intensiva, pero hizo énfasis en que el titular de la institución fue avisado sobre cómo debía prepararse para la tan anunciada llegada del pico de contagios.
“Sí, es cierto, se aumentó el sistema, porque nosotros el año pasado a estas alturas habíamos colapsado con influenza nomás (...) El sistema es tan precario que no aguanta por influenza, dengue, porque las otras patologías también están (...) De las camas de terapia, muchísimas están ocupadas por pacientes que tuvieron infartos, ACV (...) Nosotros no tenemos unas camas como para tener 500 o 400 camas de terapia, y la pelea no está ahí, porque yo pongo de ejemplo: el primer mundo perdió esa batalla. Nosotros tenemos 350 terapistas nomás y se ha capacitado, es cierto, pero es gente que no va a entrar a manejar un respirador”, explicó.
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En ese punto, recalcó que estas personas que fueron capacitadas, por decirlo de alguna manera, van a entrar a ayudar a los terapistas, no van a entrar a manejar el respirador. “Ahora estamos teniendo un médico por cada 20 pacientes. Ellos lo que entran es a controlar los parámetros, etcétera, ni siquiera pueden ajustar, entonces se descompensan tres o cuatro al mismo tiempo y ese coordinador, que puede ser uno o dos máximo por terapia, tiene que entrar a tratar de recuperar a los pacientes, mientras los otros dos están mal”, detalló.
“Ellos prácticamente tienen un cheque en blanco”
La parlamentaria aseguró que todo lo que se podía aumentar en camas ya se aumentó, en relación a que existe un gran déficit de recursos humanos para manejar estos equipos de terapia intensiva, de acuerdo a cómo lo explicó poco antes, pero subrayó que el inconveniente principal de los hospitales reside en la falta de insumos.
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“Esa fue una decisión grande que tuvimos, hasta tuvimos que ajustar eso en la Ley de Emergencia, porque ellos tienen prácticamente un cheque en blanco, el ministro considera que no y se le dijo bien: ‘Hay que comprar insumos'. Ellos le llaman los insumos COVID y no COVID, y yo le pregunto: ¿Qué son los insumos no COVID, ministro?’. Si todos, en qué sentido, un paciente COVID consume una cantidad de droga, de sedación y de anestesia, porque obviamente tenés que sedarle a un paciente para intubar. Eso, por ejemplo, está dentro de una licitación que creo que dentro de 30 días por ahí se termina”, señaló.
“Los hospitales tienen que estar rebasados de insumos como nunca y ahora están en una licitación eterna. Nosotros autorizamos sobre lo autorizado, no sé de dónde sacaron eso de COVID y no COVID, tienen una parálisis. Además, tienen un problema grave de organización y distribución. Las veces que le hemos preguntado por los equipos de protección individual (...) ‘Quiero un ejemplo puntual', me responde el ministro desde el inicio”, rememoró.
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En ese sentido, indicó que no puede dar un ejemplo puntual de dónde faltan trajes de protección o fármacos, porque diariamente recibe llamadas de varios hospitales de distintos puntos del país. Comentó que incluso ha recomendado al ministro que él mismo llame a los titulares de las regiones sanitarias y averigüe dónde se encuentran las falencias para dar una mejor respuesta al personal sanitario.
“Acá tenemos 18 hospitales regionales: ‘Llamales y preguntales y ellos no te van a mentir, y si te mienten, cambiales’. Entonces, ¿qué pasa en estos minutos? Aumentó la provisión, pero aumentó aquí, pero tenés compañeros del equipo sanitario del interior de varias zonas que siguen comprando”, referenció.
En cuanto al trabajo del Congreso de monitorear lo que está sucediendo, aseguró que hoy otra vez Mazzoleni va al Parlamento para la comisión de Hacienda. “Se le convocó a innumerables reuniones, no sé cuántas veces ya. Mazzoleni por poco no viene cada 15 días convocado; no es que viene, se le llama”, aseveró.
“Estamos en la montada del pico”
La legisladora Desirée Masi también habló de que otros de los puntos estratégicos para combatir la pandemia se basa en la capacidad de realizar los test, rastrear y aislar de manera precoz.
“España considera que tuvo una catástrofe porque el estudio estaba en 26 horas (...) No tener en este momento y tener en este momento pruebas atrasadas. Hay personas que no tienen sus resultados y obviamente no están aisladas. Otra cosa que fallamos es la comunicación, una comunicación de salud que busca un cambio brusco del comportamiento de una persona o de la sociedad, porque para que nosotros podamos parar el pico en este momento es necesaria una buena comunicación. Nosotros ya estamos en la montada del pico, ya nos estamos saturando, porque acá en Asunción y Central, acá va a ser el mayor problema”, apuntó.
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Recordó también que en todo el mundo sucedió lo mismo: siempre las regiones más afectadas fueron las capitales de los países, por la densidad poblacional. En ese contexto, reprochó por qué el Instituto de Previsión Social (IPS) o el Hospital Nacional de Itauguá no tienen laboratorios para procesar diariamente ya las muestras.
“Con suerte IPS va a empezar, desde marzo que le decimos eso, con mucha suerte va a empezar en 45 días, va a tener el equipo para hacer el testo, pero, por favor, 45 días...”, remarcó.
Finalmente, comentó que el principal miedo del personal de blanco es “quién va a venir” si se va Mazzoleni. “Con los médicos yo estoy en contacto directo, pero primero te voy a decir: en primer lugar, hay un grupo que dice que si no estaba Mazzoleni iba a estar peor. Una pandemia supera cualquier equipo sanitario. Se va Mazzoleni ¿y quién viene? ¿A quién le va a poner el Gobierno al frente? Es el miedo que ellos tienen. Ellos están agotados física y mentalmente”, dijo y pidió a la ciudadanía que si puede usar tapabocas y puede quedarse en su casa, que lo haga.
Cabe recordar que en los últimos días el número de casos positivos diarios ha aumentado considerablemente y se mantiene, mientras que también el número de muertos se ha elevado de manera considerable. A la fecha se han contabilizado 10.135 positivos de COVID-19, de los cuales 145 han fallecido y 6.210 han superado la enfermedad.