El titular de Salud, Julio Mazzoleni, en la fecha hizo un paréntesis al tema frecuente de la pandemia del COVID-19, para hablar de la situación alarmante que hacer referencia al abuso de las niñas menores de edad, en el marco de la campaña de prevención del embarazo adolescente, la cual cual señaló debe ser visualizada.
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Recalcó que “toda niña embarazada, es una niña abusada”, además de mencionar que casi el 20% de los embarazos que se registran en el territorio nacional, corresponden a niñas menores y adolescentes. Asimismo subrayó que de enero a julio se contabilizaron 282 embarazos en niñas menores de 14 y unos 5.800 en adolescentes de entre 14 y 19.
“Estos embarazos, cuando se da en niñas menores de 14 años suponen cuatro veces más riesgos de mortalidad y cuando se da entre los 15 y 19 años, el doble de mortalidad, que cuando se da entre los 20 y 35 años”, referenció.
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Asimismo aseguró que aquellos niños y adolescentes que reciben una educación importante, tienen el inicio de una vida sexual activa mucho más tardía. “Es importante que los padres hablemos siempre con los niños o de lo contrario serán los teléfonos celulares los que van a marcar siempre esa situación”, concluyó.
La campaña comunicacional “Ñañangareko” (protejamos), contra el abuso y el embarazo de niñas y adolescentes, es impulsada por el Ministerio de la Niñez y la Adolescencia para desnaturalizar el embarazo precoz y recordar a la ciudadanía que estos existen a causa del abuso infantil.
En ese contexto, esta mañana la ministra de la Niñez, Teresa Martínez, también habló de la importancia de que la educación sexual sea incluido en el programa de las escuelas públicas, porque forma parte de las acciones necesarias para prevenir el embarazo precoz.