“No recuerdo ahora mismo. Tendría que fijarme, porque no fue la única iniciativa comercial que hice”, manifestó a ABC ayer cuando fue consultado sobre la composición societaria de Gastos Comunes SA, la primera firma a la que apareció vinculado su nombre en los registros oficiales.
“Esa fue una de las iniciativas que intenté hacer y que, lastimosamente, no prosperó”, agregó.
Cuando se le consultó acerca de Mi Mina SA, su segunda empresa, la respuesta de Paciello fue: “No recuerdo”.
El concejal sí se acordó cuando se le señaló que había adquirido dos departamentos con dinero en efectivo para la firma.
“Dejame ver un poco... En algún momento sí compré como para hacer un aporte a esa sociedad. No se avanzó, se revocó esa compra. Tengo entendido, si mal no recuerdo, porque me tomás desprevenido, que llegué a pagar US$ 100.000”, apuntó.
Enseguida agregó: “Fueron dos departamentos y dos cocheras”.
“No tuvieron ni G. 1.000”
“Jamás esas empresas tuvieron ni G. 1.000. Nunca tuvieron en caja. Nunca tuvieron. Fue comunicado eso y que por ese motivo se clausuraron”, manifestó sobre sus informes.
Tampoco se acordó de dónde sacó el dinero en efectivo que entregó como pago de los departamentos. Dijo que debía revisar, pero que estimaba que gran parte había sido a través de préstamos.
Paciello sostuvo que se dedica actualmente al rubro inmobiliario. Cuando se le preguntó si tributa por esta actividad, manifestó: “Me imagino que sí. Si mal no recuerdo, desde 2008 estoy en IVA”, puntualizó.
Deudor del que no habla
Paciello no dio detalles sobre la persona a la que debe G. 2.500 millones, según sus declaraciones juradas. Solo dijo que era un ciudadano suizo que alguna vez fue su socio comercial.
“Siempre trabajé muy duro, mi vida comercial empezó muy temprano”, apuntó como justificación de su bienestar económico.
“Nunca fui administrador del dinero público. Nunca fui intendente o presidente de ente”, agregó.