Según el representante del Ministerio Público, se pudo llegar al lugar luego de recibir denuncias de lugareños, sobre la magnitud del incendio, y que apeligraba a otros establecimientos ganaderos.
Cuando la comitiva llegó al lugar ya el fuego había sido controlado, y solo se pudo constatar la quema de una gran cantidad de vegetación. El fiscal habla de unas 3.000 hectáreas aproximadamente.
En el lugar solo se pudo encontrar a algunos personales, quienes dijeron que trabajan para Cornelio Krokker, quien a la vez sería arrendatario de una parte de estas tierras, que pertenecen a la familia Garcete.
Arriola dijo que notificarán al arrendatario y a los dueños para que presenten las documentaciones que avalen los trabajos realizados en el lugar; asimismo, remitirá puntos georreferenciales sacados en el lugar a la dirección especializada de delitos ambientales del Ministerio Público a fin de poder constatar dónde se inició el fuego.
Todos los involucrados serán llamados a declarar, adelantó el fiscal, inclusive algunas personas en calidad de testigos. Los infractores de este tipo de delitos pueden recibir penas carcelarias de hasta 5 años o multas, mencionó el fiscal.
En este momento de sequía que se vive en la zona, basta solo una pequeña chispa para que arda todo el Chaco, por lo que están totalmente prohibidos los incendios, aunque estos sean controlados, aseguró.
Korochire
La historia de injusticia que afecta a los hermanos Garcete, dueños de unas 12.000 hectáreas de estas tierras conocida como Korochire, es realmente muy lamentable.
Alicia Garcete, una de las hermanas y la principal embanderada de esta larga lucha, mencionó que por varios años fueron despojados de estas tierras donde toda su familia vivió por más de 55 años.
La rosca judicial política en la que se mencionaba al entonces hombre fuerte Óscar González Daher los despojó de las tierras y de unas 2.000 cabezas de ganado vacuno registradas en Senacsa.
“En el 2019, tras largos años de lucha, pudimos recuperar las tierras, no así los animales”, dijo la mujer; “nos quedamos prácticamente sin nada de recursos económicos razón por la cual decidimos con mis hermanos arrendar una parte de la propiedad”, añadió.
Mencionó que el incendio fue de manera accidental y que solo fueron afectados 2 potreros de pasturas de unas 300 ha., y no los 3.000 que menciona el fiscal.
En las fotografías se puede notar que son pasturas y no montes, la persona que arrendó el lugar ya cargó unos 1.000 animales vacunos, dijo, y nadie en su sano juicio quemaría de manera intencional el campo donde alimenta al ganado, sobre todo en esta época de sequía, refirió.