Ante las denuncias de casos de personas que se registraron para ser beneficiarias del programa Ñangareko y que no lograron cobrar el subsidio por inconvenientes en el registro, tales como errores en la carga del número de cédula o del teléfono, y pese a que los afectados corrigieron los datos y de igual manera no lograron acceder al cobro, se solicitó información a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) para conocer el porcentaje de afectación, lo cual no respondió.
Conforme a lo explicado por un afectado, quien solicitó el anonimato, en reiteradas ocasiones se dirigió a la oficina estatal para realizar los trámites correspondientes. Sin embargo, no logró efectivizar el cobro pese a que el dinero está depositado a su nombre. Añadió que varias personas acudieron también al sitio con el mismo inconveniente.
Ante esta situación, se solicitó más información acerca de la cantidad de personas que reportan este inconveniente a la SEN y la institución no respondió al respecto, sin respetar el artículo 28 de la Constitución Nacional, que garantiza el derecho a informarse, y la Ley N° 5.282/14, que reglamenta el Libre Acceso a la Información Pública.
Esta falta de pago se suma a la serie de irregularidades en el programa estatal. Un reporte de la Secretaría Anticorrupción (Senac) reportó 162 denuncia relacionadas a este programa que fueron asignadas a la Unidad de Transparencia y Anticorrupción de la SEN.
Cabe recordar que presentaron 13 denuncias por supuestos hechos punibles de estafa, declaración falsa y adquisición fraudulenta de subvenciones relacionados al programa denominado “Apoyo para la seguridad alimentaria-Ñangareko”, según reportó Senac.
Por otra parte, la institución informó que a través de la línea (021) 220-002/3 se reciben varias llamadas cada día por reclamos relacionados a ese programa, así como también a Pytyvõ, del Ministerio de Hacienda.
Durante la presentación del programa de reactivación económica ante el Congreso, que se desarrolla esta mañana, el ministro de Hacienda, Benigno López, expresó que los recusos destinados a los programas Ñangareko y Pytyvõ fueron ejecutados en un 100%.