Con 31 votos, la Cámara de Senadores aprobó el “voto censura” al ministro de Educación tras la interpelación en la que proporcionó “respuestas insatisfactorias” a los numerosos cuestionamientos que se hicieron a su gestión como titular del MEC.
Si bien el voto de censura y la solicitud de destitución no son vinculantes para el Poder Ejecutivo -es decir, no lo obligan a tomar ninguna decisión- el mismo constituye una presión política de relevancia.
Finalmente, se obtuvieron 31 votos a favor de la censura y 11 en contra, dos abstenciones y una ausencia. El proyecto de resolución pasa a la Cámara de Diputados para su consideración.
Durante el tiempo de debate los senadores expusieron sus posturas con respecto a las explicaciones que Petta brindó durante la interpelación. Varios legisladores criticaron al ministro, a quien calificaron de “autoritario y narcisista”, además de considerarlo no idóneo para estar al frente de la cartera educativa.
El senador de Patria Querida Stephan Rasmussen indicó que de las veintidós preguntas que le fueron hechas al ministro, doce fueron insatisfactorias. Se pronunció a favor del voto censura. “Esta posición no es sobre la persona, sino sobre la gestión y los resultados que esperamos como país, en el área educativa”, recalcó.
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Se sumó a esta postura la senadora colorada Blanca Ovelar. “El virus más letal es el individualismo. Hay que construir juntos. El sistema educativo no es independiente del sistema social”, manifestó.
Por su parte, Víctor Ríos (PLRA) expresó su acompañamiento al voto censura y de igual forma manera lo hicieron Enrique Riera (ANR), Sixto Pereira, Hugo Richer, Esperanza Martínez y Carlos Filizzola, todos del Frente Guasu.
En su intervención, el senador liberal Salym Buzarquis expresó que si bien Petta, como titular del MEC cometió varios errores -entre ellos condicionar a la presentación de tareas la entrega de kits de alimentos- no se conocen denuncias sobre corrupción ni existen procesos judiciales abiertos contra el ministro. “La reacción tiene que ser proporcional a los hechos”, puntualizó.
A solicitud de diversos gremios docentes y federaciones estudiantiles, el pasado miércoles 13 de mayo, el ministro Eduardo Petta fue sometido a una interpelación por parte de los senadores con 22 preguntas preestablecidas. En sus respuestas, Petta dio a entender que existe una campaña para desprestigiarlo y que varias de las preguntas que le fueron hechas evidenciaron un “tinte ideológico”. La interpelación se extendió por 11 horas.
En el cuestionario se incluyeron temas relacionados al plan de contingencia del MEC ante la pandemia, específicamente sobre el aprovechamiento de la cuarentena para optimizar la logística en las clases virtuales, capacitación a los docentes y la recalendarización de las actividades escolares.
También hubo interrogantes sobre la entrega de kits de alimentos a las familias vulnerables.
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Tras conocerse la aprobación del voto censura por parte de los senadores, Eduardo Petta salió al paso y expresó su parecer a través de su cuenta de Twitter. Mencionó que su renuncia está disposición del mandatario y aludió a cuestiones políticas como causantes de la censura de la Cámara Alta, sin autocrítica alguna.
“En lo personal entiendo las maniobras que responden a intereses de la política y como servidor público, desde el momento en que asumí el cargo, el señor Presidente tiene mi renuncia a su disposición. La Educación no debe detenerse”, señaló.