Siguiendo la experiencia de otros países como Italia y España, que tuvieron escasez de insumos médicos para terapia intensiva, entonces fue utilizada técnica de impresión 3D para solucionar estos problemas, "surgió en mí como exbecario la idea de utilizar técnicas de impresión 3D para crear soluciones prácticas que pudieran ayudar a mis compatriotas”, indicó Federico Espínola, médico que retornó a nuestro país tras cursar un masterado en cirugía mínimamente invasiva avanzada, por medio del programa BECAL.
Las mascarillas pueden realizarse en máquinas de impresión 3D, cada vez más comunes a nivel general y además permiten el cambio de los filtros, ya sea utilizando los comercialmente disponibles, o incluso confeccionando algunos con elementos acordes, sanitariamente.
“Mi preocupación principal fueron aquellos trabajadores que durante el transcurso de la pandemia pudieran estar expuestos al coronavirus, es por esto que se me ocurrió la idea de crear una máscara de bioseguridad que podría ser utilizada en caso de emergencia”, indicó el médico, que además puso a disposición el diseño para eventuales mejoras.
La pandemia de coronavirus ha despertado el ingenio de cientos de ciudadanos para tratar de colaborar en diversas maneras a abaratar costos en insumos como las mascarillas o viseras, sino incluso maquinaria como los respiradores, sin renunciar con ello a la seguridad y calidad de los elementos.