Ambos son fugitivos de la cárcel de Marechal Cándido Rondón, ciudad brasileña ubicada a 87 kilómetros de Salto del Guairá, y fueron aprehendidos en la víspera en el barrio Industrial de esta ciudad.
Según el comisario Leonor Barrios, jefe Investigaciones de Canindeyú, los dos expulsados son delincuentes de alta peligrosidad. Valdemar tenía una condena de 60 años, mientras que Lucas tiene un encierro pendiente de 40 años, según informó.
Es más, según datos que los investigadores pudieron extraer del teléfono de uno de ellos, los facinerosos estaban programando asaltar a un cambista local para luego retornar al Brasil con el botín. Si bien no resaltó el nombre de la posible víctima, este cambista iba ser asaltado al retirar un monto importante de dinero de su patrón.
Valdemar Ullrich y Lucas Pereira se fugaron de la cárcel de Rondón en la madrugada del pasado 6 de diciembre, junto a otros seis delincuentes. “No se descarta que más forajidos se estén guareciendo en la ciudad, pero estamos atentos por si aparecen”, indicó Barrios.
Salto del Guairá es un lugar muy codiciado como guarida de delincuentes brasileños que logran escaparse de cárceles de la región de Paraná o Mato Grosso do Sul. En los últimos años fueron decenas las evacuaciones de este tipo de marginales, que son entregados a las autoridades brasileñas por vía de expulsión por violación de las leyes migratorias de nuestro país.