El trabajo se prolonga hasta altas horas de la noche a fin de dejar el lugar listo para recibir a los visitantes.
En la fecha, los trabajadores municipales continuaron durante la noche para probar parte de la nueva iluminación, que aún antes de ser inaugurada está recibiendo el beneplácito y la admiración de la ciudadanía.
Los comentarios son positivos, y la gente acude en masa para observar los trabajos; sin embargo, muchos de los pobladores comentaron la necesidad de que el lugar histórico cuente con un cuidador, porque los inadaptados primero van ensuciar y después van a destruirlo, como ocurre con la ciclovía que se encuentra en la entrada de la ciudad.
En ese sentido, el intendente, Néstor Orlando Rojas Villalba (PLRA), aseguró que el espacio tendrá su custodio en horas de la noche, y de día, una persona encargada de la limpieza en forma exclusiva. El jefe comunal acompaña los trabajos de puesta en valor del sitio.
El manantial del Ykua Kurusu, que sirvió como referencia para la fundación de esta localidad, por primera vez en 222 años está siendo hermoseado. Además de estar asociado a la fundación de San Juan Nepomuceno, muchas mujeres lo utilizaban para lavar ropas. Esta actividad de lavandera para algunas era un medio de ganarse la vida, y el Ykua era el lugar para realizar el trabajo. “Mediante este manantial hice estudiar a mis hijos”, comentaba antaño una señora, ahora ya fallecida, que vivía a metros del Ykua Kurusu.
El entusiasmo que generan los trabajos solamente había ocurrido más de 20 años atrás, con la construcción del estadio de la Liga de Fútbol Gobernador Rivera.