La denuncia fue presentada en la fecha por el jefe comunal, quien logró grabar el momento en que Filippini presuntamente le solicitaba dinero para “ayudarlo” en una investigación en su contra. A raíz de esto, el fiscal Luis Piñánez allanó ayer la fiscalía de Paraguarí, donde se desempeñaba su colega.
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Piñánez adelantó el jueves que sería inminente la imputación de Filippi por cohecho pasivo agravado, y relató que su colega ya fue investigada por él mismo por una denuncia de extorsión en el año 2013. “Hubo una investigación fiscal, además de unas evidencias que se incautaron en su momento. Era cuando un tortolero y otras personas (...) denunciaron que, en trajín de esa investigación de la que estaba a cargo esta agente fiscal (Filippi), eran extorsionadas para entregar un vehículo y sumas de dinero a cambio de que esta persona obtuviera la libertad”, detalló el investigador.
Piñanez indicó que incluso llegó a imputar a la agente hoy investigada, puesto que el documento por el cual se liberó un vehículo que estaba como evidencia llevaba aparentemente su firma y sello. “Durante la investigación, el elemento del quebrantamiento del depósito del vehículo estaba documentado a través de la entrega de una nota, por la cual la fiscala entrega esa evidencia; por eso ella fue imputada”, indicó. Agregó que, sin embargo, tras unas pericias se determinó que la firma no correspondía a la fiscala, por lo que fue sobreseída.
“Fue imputada pero (luego) desvinculada”, apuntó, y agregó que no pudo obtener entonces elementos que la vincularan a la presunta extorsión más allá de testimonios de los detenidos.
Esta vez, la agente fiscal Patricia Filippi se ve nuevamente involucrada en un intento de obtener beneficios económicos a cambio de “congelar” una investigación por lesión de confianza y enriquecimiento ilícito en contra del intendente de Escobar, Elvio Ruiz Díaz.
El propio jefe comunal grabó conversaciones que mantuvo tanto con su abogado, Dino Dávalos Torres, como con la fiscala Filippi y el asistente fiscal Adolfo Candia. En la serie de tres audios, queda en evidencia irrefutable el esquema de corrupción que manejan, e incluso ellos mismos relatan que anteriormente ya habían “solucionado” procesos, como la de la intendenta Lorena Burgos de Baruja, en Paraguarí, a cambio de generosas cantidades de dinero.
Audio 1: diálogo con el abogado
En el primer audio filtrado, el intendente conversa con el abogado Dino Dávalos Torres, jurista de su confianza, según se entiende en el diálogo. El abogado es sobrino del juez del Tribunal de Apelaciones de Paraguarí, Germán Torres.
Este le comunica al intendente que la causa en su contra es “pesada y muy amplia”, pues lo involucra por lesión de confianza y enriquecimiento ilícito. Le anuncia, además, que acaba de llegar de la Fiscalía y que “la denuncia ya entró”, pero que él le pidió a la fiscala que conversara con el intendente. “Le dije que te expliquen que sos nuestro amigo”, le comenta el abogado.
Ante esto, el intendente consulta si su causa ya está en el juzgado, a lo que el abogado responde que aún no, y que por eso le estaba avisando con anticipación.
Elvio Ruiz Díaz reclama entonces que lo tendrían que llamar de la Fiscalía, a lo que su abogado responde que están a punto de hacerlo. Ya preocupado, Ruiz Díaz pregunta “con quién hay que hablar” en la Fiscalía, y el abogado responde: “Yo ko hablo directo con quien tiene la pelota”.
Abogado Dino (AD): Yo le dije aguantámena. ¿No podemos ver para solucionar? Porque si ya trae esa carátula ko... no quiero asustarte, pero te digo bien que por enriquecimiento ilícito no hay medidas pues...
Elvio Ruiz Díaz (E): Pero tienen que investigar ko eso.
AD: Te voy a decir bien, la señora me dijo muchas cosas...
E: ¿Y qué podemos hacer, Dino, para solucionar con ellos?
AD: Y tenemos que proponerle algo a la señora para que nos congele; tojoko ñandéve péa.
E: ¿Con qué fiscal piko está ese?
AD: Con la fiscala Patricia Filippi.
E: ¡Eh! Y averiguámena bien, porque si no tenemos nada concreto...
AD: Yo te voy a averiguar bien hoy mismo. Yo ko ya hablé con ella; le dije; ‘no vayas’na a enviar ninguna imputación. Políticamente nos va a descomponer’. Y al señor de acá (el juez) ya le dije: ‘Sé bien que no le vas a dar la medida sustitutiva”. Le dije porque no se puede luego dar. ‘Si hay una denuncia, que agarremos lo más leve posible si es que no se puede atajar’, le dije.
E: Y ve un poco qué exactamente se puede hacer: si hablamos de plata, para saber cuánto. Vamos a ir a lo concreto, hablar directo.
AD: Voy a hablar con ella y después ya te concreto cómo exactamente vamos a hacer: si es que vamos a conseguirle la alegría para esta señora, y vamos a atajar ya. Porque ella me dijo que creo que ya solicitó todo luego los informes de los bancos; me dijo que ya tiene la precisa, Se desembolsó millones en la Municipalidad. Dijo que sabe todito que vos jugás a las carreras, Mirá, no sé si es cierto, que en tu cuenta personal tenés 900 millones... Vos vas a saber eso, pero se solicitó informe...
E: Chamigo, hoy en día son públicos esos informes. Mis deudas pueden ser 900 millones.
AD: Te cuento nomás. Vos tenés que ya tratar de ver todo ese tema.
E: Vémena, Dino. Voy a volver.
Así finaliza la primera charla en la que el intendente se entera del proceso en su contra. La siguiente grabación se inicia cuando el abogado supuestamente sale de hablar con la fiscala Patricia Filippi y le comunica a su cliente el acuerdo previo al que se llegó.
Le anuncia que hay “una foja grande” en su contra, a lo que Ruiz Díaz responde que, si no hay caso, no tiene problemas en someterse a la investigación y que no les teme a las documentaciones que se presentaron en su contra. El abogado le advierte que los denunciantes, a quienes no menciona aún, “no salen de la Fiscalía”, dándole a entender que son insistentes con la denuncia.
Una vez más, Elvio Ruiz Díaz pregunta “qué podemos hacer”, y ese es el momento en el cual el abogado saca el tema del pedido de coima.
“Ellos piden un monto, no sé si va a ser para vos elevado o poco. Ya depende de vos, si queres solucionar con ellos o no, pero 100 millones ojerure hikuái (piden ellos)", le plantea el abogado.
E: Hêe, oiporã (está bien).
AD: El martes va a llamar a indagatoria, si querés que te acompañe. (Con los 100 millones) podemos suspender tu indagatoria y manejar ya esto a nuestro antojo, si vos estás de acuerdo, para llegar a desestimar esta causa.
E: Ya... y dejámena... Voy a ver.
AD: Sí, vos vas a pensar eso antes de que llegue ya con esta carpeta de enriquecimiento ilícito, porque si comunican de nosotros al juzgado... Yo quería que vos hables por eso con el doctor Cabriza, el juez que va a atender la causa, para que te fijes bien cómo viene la mano.
E: ¿Ha mávape la plata ñame’ẽva’erã? (¿a quién tenemos que darle la plata?)
AD: Y directamente con la señora (la fiscala). Nosotros negociamos la vez pasada con la doctora Baruja (Lorena de Baruja); ya era último caso... y le salió muchísimo más caro, pero se desestimó al causa.
E: No hay problema, no tengo miedo a la investigación. Me quieren embarrar, tengo los documentos para uno por uno demostrarles. Vamos a estar hablando.
AD: Sí, tranquilo. Yo te comunico nomás que hablé con la señora (Filippi). Le llamé; le dije: “vémena”, y me dijo: “Ese es el monto que yo mínimamente voy a aceptar, y vamos a solucionarle de alguna manera”, he’i chéve.
E: ¡Dale!
Audio 3: Ruiz Díaz acude directo a la fiscala
Al finalizar esta segunda charla, el intendente decide ir directamente ante la fiscala, sin intervención de su abogado.
En un primer momento, Patricia Filippi disimula sus intenciones y finge incluso que no sabe de qué le habla el intendente, pero a medida que avanza la charla, tanto la fiscala como su asistente se animan a hacer el pedido concreto: G. 70 millones.
E: ¿Por qué piko me demandan, doctora?
F: Varios hechos son.
E: Sobre ese tema quería hablar contigo, para que me ayudes un poco y seas un poco objetiva con la investigación. Nosotros estamos abiertos, trajimos ocho carpetas.
En un momento dado, aparece en escena el asistente fiscal Adolfo Candia, quien comienza a detallarle al intendente en qué consisten las denuncias en su contra y quiénes son los denunciantes.
“La denuncia fue realizada por dos concejales: Adolfo Rodas y Raúl Antonio Chávez. Ellos presentaron varios documentos. Manifiestan que hasta marzo pidieron informes, que 1.237 millones por ahí se recibió a través de la Municipalidad, y que se desembolsaron casi 4.000 millones del 2018, pero que no se ven obras significativas en la ciudad y no saben dónde el dinero fue a parar supuestamente. Después vinieron a ratificarse; mandamos oficios solicitando documentos”, le resume el asistente, a lo que el intendente responde: “Y ya presentamos todo esos documentos”.
Candia le recalca que los denunciantes vinieron a ratificarse. La conversación continúa de la siguiente manera:
E: Decime, fiscala, ¿qué lo que podemos hacer acá?
Fiscala (F): Una causa parecida hubo acá, y acercaron un montón de documentos, y eso se subsanó de alguna manera...
E: ¿Y esto también podemos solucionar así, doctora?
F: Y hay que pedir peritos.. .Todas esas cosas: ver, comparar; va a llevar su tiempo...
E: Pero el de Lorena (Burgos de Baruja) y eso ya estaba todo finiquitado.
F: Ahora sí ya está finiquitado. Mercedes creo que tenía, la otra fiscal; después a ella le recusaron, y pasó conmigo, y a fin de año se solucionó, en la feria.
E: ¿En este caso, aparte, qué podemos hacer, fiscala?
F: ¿Qué podemos hacer de qué?
E: Y no sé... Yo quiero solucionar pues esto. A mí ko me llamó... No sé si le conocés a Dino, el abogado...
F: De vista.
E: Estuvimos hablando, y me dijo que hable contigo. Él me recomendó pues, y que podemos solucionar, no sé, de alguna forma.
F: Mmm... Yo le conozco de vista a él...
E: Te digo nomás; le dije que estaba preocupado por la situación.
F: ¿Pero qué tipo de solución lo que vos querés?
E: El ningo me dijo tema de plata, que hay un pedido, y yo le dije que quería hablar contigo, porque imaginate si le doy alguna plata a otra persona, y si esto sigue no sé cómo después vamos a...
F: Habrá sido por sus honorarios lo que le habrá dicho, señor.
E: No sé a qué se refería...
Posteriormente, tras hacerse la desentendida, la fiscala le continúa preguntando al intendente si tiene abogados en Asunción, a lo que él responde que cuenta con un equipo técnico en la Capital. Cuando Elvio Ruiz Díaz muestra sus intenciones de retirarse diciéndole a la fiscala que al menos llevará la copia de la carpeta para ver de qué se lo acusa, esta lo retiene con más preguntas. Involucra a su asistente, Adolfo Díaz, a quien le pide que le recuerde cómo “habían solucionado” la causa anterior, la de la intendenta Lorena Burgos de Baruja.
Asistente (A): Tuvimos una causa similar. La señora Lorena tuvo el mismo problema, y a ella se le dio una solución, legalmente, sin que se le impute.
E: A mí ya me están por imputar, según me comentaron. Viste que es la indagatoria y después ya...
A: Sí, pero aún no hay nada. Te vamos a explicar bien. En esa causa sí que era bastante más complicado porque todo el día hinchaba el que le denunciaba, en la prensa y todo publicó de aquí para allá. Lo que sí que se solucionó eso.
A: La señora Lorena se acercó y se encubrió totalmente la denuncia, porque ellos contrataron a alguien especializado, un señor era el que prácticamente blanqueó la Gobernación; él era el que le preparaba todo a Baruja la rendición y eso.
F: Me estaba contando el intendente que el abogado este vino, ese chiquito, y le dio una posibilidad de solucionarle cosas así.
A: Sí, vino, sí. Acá la lesión de confianza en sí no es tan grave, porque fueron documentos aprobados por la Junta.
E: Acá pues lo que a mí me preocupa es enriquecimiento ilícito.
A: Eso sí, porque ahí ya te van a empezar a fastidiar en lo personal.
F: Si se va a Asunción, sí que ahí ya estamos fritos.
A: Se va a la Fiscalía Especializada de Delitos Económicos, y ahí pues ya no creo que se tenga más contactos con nadie (risas).
E: Y, bueno, ha péva ko hína la asunto...
F: Y si estás dispuesto a solucionar...
A: Podemos ko disfrazar toda la denuncia.
F: Si está dispuesto que se le ayude, se le puede ayudar...
E: Y no hay ko problema. Con el precio que me pasó Dino nomás...
A: ¿Cuánto te pidió?
E: Y 100 millones ko él me pidió.
A: Háihue!
E: Ha upévako hetaitereíma (y eso ya es demasiado). Ahora, si ustedes me pasan un monto menor, yo puedo ver este fin de semana, la próxima semana...
F: ¿Cuánto?
E: Y eso ya depende de ustedes.
F: Ya que te tiraron ese precio de las nubes, ¿de cuánto sería tu...?
E: Y decime’na una cosa, doctora. Acá ningo hay una cuestión: él (abogado) me dice que esto va a pasar sí o sí al Juzgado.
A: La comunicación, sí... Te voy a explicar: él pues tiene miedo de la imputación, doctora.
E: Claro, porque si se va allá, seguramente el doctor Cabriza me va a llamar. Lo que a mí me preocupa es si igual me corre esto, y si me pillan otra vez estos concejales...
A: Acá lo que hay que sacarles a esos concejales, a María Elena y eso de la negociación, que presenten ellos. Nosotros vamos a ir cubriendo todo.
F: Y para que se callen, a lo mejor también les puede enviar algo a ellos... Digo yo, porque viste que es muy grave el enriquecimiento ilícito.
E: Cuando entramos en la Justicia nomás lo que ya es complicado. Ahendu que la enriquecimiento ilícito ndaipóri voi ni medida sustitutiva.
A: Acá nomás tenés que solucionar, antes de que se vaya en Asunción.
E: Eh... Ha mboy, ñañemongeta haguã (y cuánto, para poder conversar). Voy a ver con mi familia, conversar... Entonces nos comunicamos.
A: Te voy a decir bien la verdad cómo podés hacer, para que vos también no te esfuerces. Vamos a ser indiscretos. Ojalá que quede todo acá. Aunque sea que des una mitad, una seña, y a medida que va avanzando todo...
E: ¿Y de cuánto hablamos en total?
A: Y la verdad que estaría muy bien aunque sea.... un 20 (millones) a la fiscal para un adelanto, y veme aunque sea un 5 millones a mí.
F: ¿Pero eso ya es por todo?
A: ¡Claro que no, doctora! (risas) Pero es para que él no piense que ya es mucho dinero.
E: Ese va a ser un adelanto...
A: Un adelanto, y dejá que pase todo. Vamos a ver qué presentan estos concejales.
E: Ehh, pero ellos van a insistir hína, y María Elena, si es que está de por medio.
A: Dejá que insistan, si nosotros vamos a cubrir...
F: Si vos estás dispuesto a solucionar también con ella, se va a callar.
E: Yo no tengo comunicación con María Elena; ella es...
F: ¿Vos querés solucionar?
E: Y acá hay que ver... todo completo.
F: Y cuánto estás dispuesto a darle para que se tranquilicen y dejen de hinchar.
E: Y yo ko no sé... Eso depende...
F: Pero yo quiero saber, para poder hacer...
E: Porque a mí pues me tiraron un número grande ellos, y yo no estoy en condiciones.
Cerrando cifras
En medio del extenso diálogo, la fiscala le pregunta al intendente qué le parecería dar unos G. 70 millones, a lo que Ruiz Díaz nuevamente responde que lo va a pensar.
Luego le explica a la fiscala y al asistente que esto se trata de un tema político y personal por cuestiones pasadas.
Finalmente, el intendente queda en comunicarse el lunes, y la fiscala le reitera insistentemente que los G. 20 millones solo son “para el inicio”.
A: No te preocupes por más que soliciten cosas. Si vos ya llegás a un acuerdo con la fiscala, ella es la que impulsa la investigación; vos ya hablaste con ella, ya estás protegido.
E: La vez pasada yo tenía miedo de que me allanen todo; me van a reventar si es que se allana la Municipalidad, pero por lo menos no sucedió eso.
F: Pregunto (nuevamente insiste) hasta cuánto vos estás dispuesto, para ellos y para mí; para todos...
E: Ha ndaikatúi piko peteĩ cincuenta? (¿y no se puede un 50 millones?)
F: 70...
E: Y voy a ver mis posibilidades; como él dice, si traigo un 25 y después el resto pues va a ser diferente.
F: Eso es para nosotros, pero ellos... como para englobar todo, por partes, obviamente.
E: Yo te puedo traer los 25 este fin de semana; junto esa plata y nos comunicamos el lunes. Mientras tanto, ya vas a hablar también con esa gente pues. ¿Te parece, doctora, o hay apuro en eso, si es que necesitás antes, o me vas a llamar?
A: Mañana ya es sábado... domingo...
E: Este fin de semana me va a ser difícil porque ambyaty va’erã avei (tengo que juntar además). Estoy en una situación medio difícil...
F: Pero que quede claro que es una seña...
E: Eso ya me quedó muy claro. Después vamos a hablar por el resto. Está, doctora, gracias por todo.