Según la veterinaria Adriana González, el peso ideal varía dependiendo del tamaño del perro. A simple vista se puede detectar una posible obesidad por una nula cintura y acumulación excesiva de grasa en el abdomen.
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“A través de sus comportamientos también comunica que algo está pasando, por ejemplo, si comienza a ser sedentario, le cuesta respirar o se cansa muy rápido en actividades físicas diarias. Los perros y gatos obesos tienen más riesgos de padecer enfermedades del corazón, diabetes, artritis hasta de muertes anticipadas”, explica la doctora.
Algunas acciones para evitar la obesidad
- Suministrar raciones adecuadas.
- Una mejor alimentación balanceada.
- Realizar actividades físicas.
- Evitar lo mayor posible, comidas caseras.
- Al seleccionar el balanceado hay que asegurarse uno que brinde los nutrientes que necesita.
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Sedentarismo
“El sedentarismo o falta de ejercicio, sumado a un consumo excesivo de calorías, son los principales responsables de la obesidad en perros, sin embargo, es necesario que diariamente dediques un espacio de tu día a ejercitar a tu fiel amigo”, recomienda Adriana.
Recalca la veterinaria que el consumo excesivo de calorías y falta de actividad física, suele sumarse la costumbre de darles golosinas o restos de comida en la mesa a los perros, y esto da paso a un gran aumento en el aporte calórico diario.
“Así que disminuir los snacks, ayudará a controlar el peso de tu perro”.
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