Garrapatas chupasangre

El perro puede hospedar a parásitos externos, entre ellos la garrapata que succiona la sangre y a su vez produce enfermedades que se transmiten a otros animales y al ser humano. El can demuestra poco apetito, cansancio y es evidente que sufre dolores articulares.

El perro puede hospedar a parásitos externos, entre ellos la garrapata que succiona la sangre y a su vez produce enfermedades que se transmiten a otros animales y al ser humano.
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A las garrapatas les encanta la humedad y la sombra, pueden encontrarse en animales, jardines y parques.

Las garrapatas caen al suelo y vuelven a subir al animal, principalmente en las razas con poco pelaje.

Si nota que estos insectos se encuentran entre las patas de su perro no las retire con las manos, ya que puede que no extraiga todo el parásito y quede una parte. Utilice una pinza y cersiorese de que salga la cabeza de la garrapata.

Este parásito externo se alimenta de sangre, y es portador de distintas enfermedades. Se instala en la piel del perro y succiona su sangre. Luego pasa a otro animal y ser humano.

Fumigación y baño

El veterinario le dará el nombre del antiparasitario que debe utilizar junto a los artículos de limpieza y baño.

La casa debe fumigarse especialmente en los lugares donde transita el perro.

Los antiparasitarios los aplica el veterinario, ya que son por lo general inyectables, y no olvide los baños medicados.

Si se trata de un cachorro de menos de tres meses seguramente será tratado con un talco medicado.

Las alfombras y muebles deben moverse, sacudirse y dejar que entre el sol con ventanas abiertas.

De modo preventivo mantenga la higiene, y utilice pipetas que se venden en las veterinarias.

Mejor no

Abstengase de aplicar lavandina, aceite de motor, querosén o creolina, que antes de ayudar dañan la piel del animal, que enseguida pierde pelo y hasta muere intoxicado.

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