El hámster posee tonos de pelaje blanco y gris, marrón o negro y con esa carita tierna capta la atención de sus dueños. Muchos prefieren tenerlo como mascota porque les divierte su hiperactividad.
Este roedor necesita hacer ejercicios y si está en una jaula hay que proporcionarle algunos juegos como ruedas, tubos y otros para que se mantenga en forma. Pueden ser ruso (pequeño), sirio o “panda” (más grandes y peludos).
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Aunque sienta la tentación de tenerlo en las manos, no es aconsejable, ya que es tan inquieto que podría caerse y eso pondría en riesgo su vida.
¿Cómo alimentarle? Con mezclas de semillas, maní, girasol, maní, y balanceados de conejos son sus favoritos. Otras opciones son: alfalfa, lechuga, pepino, remolacha y manzana.
Si tiene varios ejemplares es probable que se reproduzca con hasta ocho crías, por eso la mayoría de la gente opta por tener uno solo.