Peña, de 46 años, subió sonriente la rampa que da acceso al salón de reuniones, donde hoy el G20 y los países invitados, entre ellos Paraguay, discutirán la transición energética y el desarrollo sostenible, reporta EFE.
El gobernante acudió al G20 invitado por el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, que ocupa la presidencia rotativa del foro que reúne a las mayores economías del planeta.
El mandatario paraguayo ingresó en el hospital Samaritano, en el barrio carioca de Botafogo, tras sentir un “malestar” en la tarde del lunes y pasó toda la noche ingresado hasta que fue dado de alta esta mañana.
El equipo médico realizó diversos exámenes al jefe de Estado y “descartó enfermedades de corazón o cualquier otra patología grave”, según el último boletín médico.
“El Presidente pasó la noche en observación, durmiendo tranquilo y con todos sus indicadores estables”, señaló la clínica privada, que lo liberó también para dar continuidad a su agenda con normalidad.
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Peña, que el sábado cumplió 46 años, juró al cargo en agosto de 2023, con lo que se convirtió en el Presidente más joven de la era democrática que el país suramericano inauguró tras la caída de la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989).
En la primera jornada, los líderes debatieron sobre cómo erradicar el hambre en el mundo, la reforma de los organismos internacionales y un impuesto universal sobre los llamados superricos.
El G20 está formado por Alemania, Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica y Turquía, además de la Unión Europea y la Unión Africana.
No obstante, Lula ha incorporado a buena parte de los países sudamericanos a la cumbre de este año.