El médico, jefe del servicio de urgencias, fue agredido por el nieto de una paciente, al enterarse de que le daban el alta en la Unidad de Cuidados Intensivos, informan los medios locales.
En el centro sanitario había dos agentes de la policía que bloquearon al agresor de 28 años, conocido por la policía, que ya ha sido detenido y acusado de haber cometido agresiones graves.
"Ya no tenemos la libertad ni la tranquilidad para hacer este trabajo", declaró el médico agredido en una entrevista al 'Corriere della Calabria", que presenta moratones y contusiones por los golpes.
El servicio de Salud de la provincia de Catanzaro condenó en un comunicado esta agresión y reclamó medidas a las autoridades: "No es tolerable que se entre en un hospital con una porra para imponer por la fuerza y la violencia un abuso", denunció.
Por su parte, el presidente de la Región de Calabria, Roberto Occhiuto, lamentó este "enésimo episodio violento contra el personal sanitario que provoca gran alarma y recuerda la urgencia de activar todas las medidas necesarias para proteger a nuestros médicos y enfermeras".
Italia ha registrado en los últimos tiempos varias agresiones al personal sanitario, que en opinión de los sindicatos "van en aumento".
El pasado 27 de septiembre el Gobierno italiano aprobó un decreto para agravar las penas contra quienes cometan agresiones contra el personal sanitario y acordó la instalación de cámaras de vigilancia como medida disuasoria tras el aumento de los casos.