"Será un hito al que acudirán 130 representantes gubernamentales, 80 de ellos a nivel ministerial, y más de un centenar presentarán compromisos formales para acelerar el camino hacia el fin de la violencia infantil", analizó en rueda de prensa el especialista en este campo Etienne Krug, quien representará a la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la capital colombiana.
Krug, director del departamento de Condicionantes Sociales para la Salud en la OMS, subrayó que tras los dos días de reuniones se espera que haya un enérgico llamamiento a la acción con recomendaciones sobre la educación parental, los servicios de atención a víctimas, o el fin de los castigos corporales en la escuela.
Acerca de ese último punto, la OMS adelantó que se espera que al menos una decena de gobiernos participantes expresen su compromiso de poner fin a los castigos físicos en el entorno escolar.
La directora de Protección Infantil del Fondo de Naciones para la Infancia (UNICEF), Sheema Sen Gupta, agregó que se buscará en la conferencia desarrollar sistemas de acceso universal a la educación parental, de construcción de ambientes escolares seguros, y respuestas enfocadas a víctimas de la violencia infantil.
El jefe de la unidad de prevención de violencia de la OMS, Alex Butchart, recordó que la violencia infantil varía a menudo según el género: mientras la sexual afecta especialmente a las niñas (una de cada cinco han denunciado ser víctimas de ella), los niños corren mayor riesgo de violencia física e incluso agresiones con armas a medida que avanzan hacia la adolescencia.
Niños y niñas, por otro lado, son con frecuencia víctimas de castigos corporales en el seno de sus familias, algo que según cifras de la OMS afecta a unos 400 millones de niños menores de cinco años.
La conferencia está patrocinada por la OMS, UNICEF y los gobiernos de Colombia y Suecia, y contará con la participación del representante del secretario general de la ONU para el combate de la violencia infantil, Najat Maalla.