"Condenamos los actos de violencia perpetrados por extremistas y separatistas en el templo hindú Sabha de Brampton, Ontario", dijo en una respuesta a los medios de comunicación el portavoz oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores indio, Randhir Jaiswal.
El vocero instó al Gobierno canadiense que dirige Justin Trudeau a que "garantice que todos los lugares de culto estén protegidos de este tipo de ataques".
"Esperamos que quienes cometan actos de violencia sean procesados. Seguimos profundamente preocupados por la seguridad de los ciudadanos indios en Canadá", dijo Jaiswal que afirmó que los actos acontecidos en Brampton no afectarán a los servicios consulares en Canadá.
Imágenes de los actos violentos ocurridos en Canadá fueron publicados por varios perfiles en las redes sociales, entre ellos por el diputado canadiense de origen indio Chandra Arya, miembro del Partido Liberal de Trudeau.
La actividad separatista en suelo canadiense ha alterado las relaciones entre India y Canadá. La tensión comenzó a escalar en septiembre de 2023, cuando el primer ministro canadiense acusó a la India de estar detrás del asesinato en Vancouver de líder separatista indio Hardeep Singh Nijjar, partidario de la creación de un país independiente -Khalistan- para la minoría sij en el estado noroccidental de Punjab.
Nueva Delhi sostiene que Ottawa no ha presentado ninguna prueba al respecto y acusa a Canadá de permitir el resurgimiento de este movimiento separatista punjabí, hasta ahora casi extinto.
Los máximos representantes diplomáticos de los dos países fueron expulsados por los respectivos gobiernos en octubre pasado.
Nijjar fue tiroteado en el este de Canadá el 18 de junio de 2023 por varios desconocidos en el aparcamiento de un templo sij.
El activista, que tenía la nacionalidad canadiense, había sido acusado de terrorismo por las autoridades indias.