Esta ave anida en la parte alta de algunas islas del archipiélago galapagueño como las de Santa Cruz, Floreana y Santiago, donde se localizan las colonias más importantes, según informó la DPNG en un informe.
El petrel de Galápagos es un ave marina que durante la etapa de anidación desarrolla hábitos nocturnos, tiene una sola pareja durante su vida y regresa cada año al mismo nido para poner un solo huevo, el cual es incubado durante unos cincuenta días por ambos padres.
El pichón de petrel de Galápagos suele permanecer unos 150 días más en el nido junto a sus padres hasta que es suficientemente fuerte para volar a mar abierto, agregó la DPNG.
Desde mayo pasado, cuando inició la temporada de anidación del petrel, los guardaparques del Parque Nacional han revisado periódicamente 759 nidos ubicados en Media Luna y Cerro Helechos, dos zonas altas de la isla Santa Cruz, la más central y poblada del archipiélago.
En total se han registrado 277 pichones y en la zona de Media Luna los guardaparques han registrado un nido activo por más de 30 años consecutivos, precisó la entidad.
El objetivo principal de la vigilancia es "determinar la ocupación de los nidos por las parejas, la presencia de huevos o de pichones y, posteriormente, el abandono del nido una vez que la cría es capaz de volar", añadió.
Una de las características del petrel es su comportamiento reproductivo, ya que excava profundas cuevas o túneles en terrenos blandos de las zonas altas cubiertas de vegetación.
"Estas áreas son altamente sensibles, por lo que los guardaparques ejecutamos actividades de control de especies introducidas, especialmente roedores, durante todo el año. La temporada de anidación comienza en mayo y termina con el abandono de los últimos nidos a finales de diciembre", manifestó Johanes Ramírez, responsable del área de Especies Nativas y Endémicas del Parque Nacional Galápagos.
Estas acciones de conservación se replican en las demás zonas de anidación de las islas San Cristóbal, donde se registran 325 nidos, y en Floreana, con 328.
Las Islas Galápagos, situadas a unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador, son el hábitat de más de 45 especies de aves endémicas, 42 de reptiles y 15 de mamíferos; así como de 500 especies de flora, entre plantas vasculares, briofitas y algas.
La especie más representativa del Parque Nacional Galápagos son las tortugas gigantes que habitan varias islas y que dan el nombre a este archipiélago de origen volcánico en el suroeste del océano Pacífico.
Las Galápagos están formadas por trece islas grandes y son consideradas un laboratorio natural que inspiró al científico británico Charles Darwin a desarrollar en el siglo XIX su teoría sobre la evolución y selección natural de las especies.