Venezuela afronta una crisis tras las votaciones del domingo que dejó una dudosa reelección del presidente Nicolás Maduro, que fue proclamado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) -bajo control absoluto del chavimos- en tiempo récord y sin mostrar los detalles del conteo de los votos.
Hasta la fecha, al menos cuatro personas murieron durante las manifestaciones ciudadanas surgidas en reclamo por la transperencia en el conteo de los votos.
Al mediodía la oposición convocó a una protesta frente a la sede de las Naciones Unidas.
Luego de la conferencia de Padrino López las Fuerzas Armadas movilizaron tanques por las avenidas de Caracas, capital venezolana.
La ONG Foro Penal reportó el primer fallecido en el estado de Yaracuy, y luego la Encuesta Nacional de Hospitales, una red que monitorea la crisis hospitalaria, informó de otros tres muertos y 44 heridos, la mayoría por arma de fuego. El ministerio de Defensa informó que 23 efectivos militares también resultaron heridos, informó AFP.
Advertencia del aliado de Maduro
El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, denunció golpe de Estado “fraguado nuevamente” por “factores fascistas de derecha extremista”, en alusión a las protestas desatadas en las últimas horas en varias regiones del país, en rechazo al resultado de las elecciones del domingo, en las que Nicolás Maduro fue anunciado como mandatario reelecto por parte del Consejo Nacional Electortal (CNE), publicó EFE.
“Estamos en presencia de un golpe de Estado (...) fraguado nuevamente por estos factores fascistas de derecha extremista, apoyado, por supuesto, por los factores imperiales, el imperialismo norteamericano y sus aliados (...). Y ese golpe de Estado lo vamos a derrotar”, manifestó el ministro, en una alocución televisada, en la que habló acompañado por la cúpula militar.
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