“Los actuales propietarios de Sore Fagerfjor están abiertos a vender a actores que podrían desafiar la legislación noruega en Svalbard”, dijo la ministra de Comercio e Industria, Cecilie Myrseth en un comunicado.
“Podría perturbar la estabilidad en la región y potencialmente amenazar los intereses noruegos”, agregó
La propiedad de Sore Fagerfjord, en el suroeste de Svalbard (60 kilómetros cuadrados de montañas, llanuras y un glaciar), estaba a la venta por 300 millones de euros
El archipiélago está situado a medio camino entre la Noruega continental y el Polo Norte, en una región del Ártico que se ha convertido en un foco geopolítico y económico a medida que el hielo se derrite y las relaciones entre Rusia y Occidente se vuelven cada vez más tensas.
Svalbard se rige bajo un marco legal inusual que permite a entidades extranjeras afianzarse en la región.