"Si los sionistas llevan a cabo su amenaza, el ritmo y el tipo de operaciones contra ellos aumentará, y los intereses del enemigo criminal estadounidense en Irak y en la región serán objetivo legítimo", dijo el Comité de Coordinación de la Resistencia Iraquí, que engloba a las milicias proiraníes más poderosas del país.
La agrupación indicó en un comunicado que mantuvo una reunión "tras las amenazas del enemigo sionista-estadounidense de lanzar una guerra integral contra el Líbano y su valiente resistencia", en referencia a Hizbulá, que desde el pasado 8 de octubre está enzarzado en un intenso fuego cruzado fronterizo con Israel.
La nota no especificó qué tipo de acciones llevarán a cabo, si bien estas milicias son uno de los principales integrantes de la alianza informal Eje de la Resistencia, liderado por Irán y que integra a Hizbulá, los rebeldes hutíes del Yemen o al grupo islamista Hamás, entre otros.
Algunas de las milicias iraquíes han lanzado cientos de ataques contra objetivos militares estadounidenses en Irak y Siria desde el estallido de la guerra en Gaza, pero estos cesaron después de que un ataque lanzado por estos grupos matara a tres soldados estadounidenses en la frontera entre Siria y Jordania en enero.
Sin embargo, han seguido lanzando de manera esporádica drones y cohetes contra territorio israelí y, desde principios de junio, han empezado a realizar operaciones conjuntas con los hutíes del Yemen contra objetivos del norte de Israel, aunque estos han sido interceptados.
Por otra parte, el Comité indicó que "las masacres y el genocidio" en Gaza "exige mantener posturas firmes contra los países de la normalización", en referencia a las naciones árabes que mantienen relaciones con Israel como son Jordania, Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Baréin.
En este sentido, pidió "no apoyarlos con el petróleo y el dinero de Irak" y se mostró en contra del oleoducto que conecta la ciudad iraquí de Basora con la jordana de Aqaba, sin especificar las acciones que tomarían contra la infraestructura.
Israel y Hizbulá están enzarzados en sus peores choques desde la guerra que libraron en 2006, algo que ha sembrado los temores sobre una posible operación a gran escala de las fuerzas israelíes contra el sur del Líbano.