Eisenkot, recoge el diario Times of Israel, transmitió al comité la necesidad de “alcanzar el fin de los combates en Rafah y, a la vez, avanzar en el acuerdo por los rehenes”.
Además, el exmilitar, miembro del Knésset (Parlamento), defendió que por ese acuerdo para recuperar a los secuestrados Israel cesaría la lucha “durante el tiempo que fuera necesario”.
Eisenkot recordó la tregua alcanzada con Hamás a finales de noviembre, que duró una semana, para asegurar que “pueden suspender los combates y volver a ellos durante el tiempo que sea necesario para alcanzar los objetivos de la guerra”.
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La petición de Eisenkot llegó después de un bombardeo israelí contra Rafah que deja por ahora 45 muertos -veintitrés de los cuales son mujeres, niños y ancianos- y 249 heridos.
La ofensiva en Rafah desde el 6 de mayo
El ataque se produjo contra un campo de refugiados en el barrio de Tal al Sultan, al noroeste de la ciudad, que era considerada una ‘zona segura’ ya que el Ejército no había llamado a su evacuación todavía, como sí hizo con zonas del este y centro del enclave.
Desde que el Ejército comenzó su ofensiva en Rafah el 6 de mayo, casi un millón de personas han huido, la mayoría a las playas de Al Mawasi, donde permanecen hacinados sin acceso a servicios de saneamiento o agua potable.
El Ministerio de Sanidad de Gaza notificó hoy que los muertos por fuego israelí desde el 7 de octubre ascienden a 36.050, mientras que los heridos crecieron hasta los 81.026.
Además, la institución recuerda diariamente que más de 10.000 cuerpos permanecen enterrados bajo los escombros, sin que las ambulancias ni los equipos de rescate puedan acceder a ellos.