La decisión de extremar las precauciones en el territorio argentino, donde reside la mayor colectividad judía de América Latina y la quinta del mundo, fue tomada el domingo por el Ejecutivo que preside el liberal Javier Milei, durante una reunión extraordinaria, según confirmó el portavoz presidencial, Manuel Adorni.
“Se ha aumentado el nivel de seguridad (…) en todos los objetivos, sitios o espacios que son lugares más sensibles, para que en este momento tengan seguridad adicional”, dijo Adorni en su conferencia de prensa diaria en la Casa Rosada (sede del Gobierno), en la que no detalló cuáles “por seguridad”.
No obstante, medios locales apuntan que la seguridad habría aumentado en varias embajadas y aeropuertos ante la posible existencia de amenazas o ataques.
Lea más: Israel analiza en la mesa de crisis “pasos y fechas” sobre represalía
Bolivia
Además, el portavoz admitió que “se están tomando las medidas necesarias para tener un mayor control en la frontera” con Bolivia, al noreste de Argentina.
El país andino goza de una buena relación con el Gobierno iraní, lo que algunas asociaciones hebreas de Argentina califican de “conducta expansiva con el terrorismo”.
El mandatario argentino presidió el encuentro de emergencia, bautizado como “comité de crisis”, tras haber cancelado su viaje a Dinamarca donde tenía previsto concretar la compra de una flota de 24 cazas de combate F-16 para modernizar la Fuerza Aérea Argentina.