De acuerdo a los datos divulgados por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (Ibge, estatal), la inflación registrada en marzo fue la menor para ese mismo mes desde 2020.
El resultado del tercer mes del año mostró una desaceleración del aumento de los precios en relación a febrero, cuando la inflación había sido del 0,83%, informó EFE.
Además, mantiene las perspectivas para 2024 dentro de la meta trazada por el Banco Central, que es concluir el año con una tasa de inflación del 3%, con una tolerancia de 1,5 puntos porcentuales, que eleva ese techo al 4,5%.
Las proyecciones del mercado financiero no son muy lejanas a las del Banco Central y, según un informe presentado el pasado lunes, los expertos del sector privado esperan que este año concluya con una inflación del 3,76%, dentro de los parámetros fijados por el instituto emisor.
Alimentos y educación
La “desaceleración en la inflación (...) se explica por el hecho de que, en febrero, los precios de la Educación tuvieron alzas significativas (casi 5%) por los reajustes habituales en el inicio del año lectivo, lo que no ocurrió en marzo” , explicó André Almeida, gerente del informe del IBGE, citado en una nota.
La inflación de marzo se explica sobre todo por incrementos en los rubros alimentos y bebidas, de 0,53%, debido a “problemas relacionados a cuestiones climáticas”, según el informe oficial.
En marzo, los precios de los alimentos “siguieron subiendo, aunque con menos intensidad” que en febrero, indicó Almeida. También contribuyeron alzas en salud y cuidados personales (0,43%), detalló el IBGE.