El sismo fue registrado hacia las 6:00 hora local (00:30 GMT) en la provincia afgana de Kandahar, con unos 10 kilómetros de profundidad, y cerca de 60 kilómetros al norte de la ciudad fronteriza paquistaní de Nushki, informó el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, en inglés).
Por el momento no se han reportado víctimas o daños en infraestructuras como consecuencia del temblor, en un país que sufre frecuentemente este tipo de catástrofes naturales, sobre todo en la cadena montañosa oriental del Hindu Kush, un punto de gran actividad sísmica.
Aunque muchos de estos temblores son de magnitud moderada, la fragilidad de las infraestructuras afganas multiplican en ocasiones los efectos de estos terremotos.
La provincia occidental de Herat vivió uno de los peores seísmos recientes el pasado 7 de octubre, cuando un temblor de 6,3 de magnitud y unas sucesivas réplicas de considerable intensidad ocasionaron más de un millar de muertos y decenas de miles de heridos, además de la destrucción total de una veintena de aldeas.
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La cadena de terremotos no cesó en la zona, que continuó temblando a lo largo de esa semana, en medio de las operaciones de rescate y la llegada de ayuda humanitaria.