Tras asumir la Presidencia argentina el 10 de diciembre pasado, Javier Milei envió al Parlamento un proyecto de la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, con medidas y reformas amplias y una polémica delegación al Ejecutivo de facultades que son propias del Legislativo.
Debido a la intransigencia de la oposición y del Gobierno a negociar y acordar aspectos diversos del proyecto, la denominada 'ley ómnibus' naufragó en su tratamiento parlamentario y el Ejecutivo resolvió devolver la iniciativa a comisiones.
Tras ello, el 1 de marzo, Milei propuso a los gobernadores firmar el 25 de mayo un nuevo "pacto fundacional", con una decena de puntos en materia económica y política, a condición de que se apruebe primero un nuevo acuerdo en materia fiscal y la 'ley ómnibus', que el Ejecutivo reimpulsará ahora con algunas modificaciones.
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"Prontamente vamos a poder llegar a un acuerdo con los gobernadores y reenviar la nueva versión de la ley de bases", indicó este sábado Milei.
Rechazo del DNU
El jueves pasado, el Gobierno se encontró con un escollo político cuando el Senado, por mayoría, rechazó un amplio decreto de necesidad y urgencia (DNU) de desregulación de la economía firmado por Milei en diciembre.
El DNU sigue vigente porque aún debe ser tratado en la Cámara de Diputados, donde podría resultar invalidado definitivamente.
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Milei dijo que si la “casta política” se comporta con el “Pacto de Mayo” como lo hizo con el DNU, el pacto estará “lejos” de ser firmado, aunque se mostró abierto a dialogar con la oposición.