“La Unión Europea condena firmemente el atentado contra la Embajada de Suecia en Irak y pide que se protejan los locales diplomáticos en Bagdad, de conformidad con la Convención de Viena”, indicó Borrell en un comunicado.
El jefe de la diplomacia comunitaria confió en que las autoridades iraquíes adopten “rápidamente” las medidas de seguridad necesarias para “evitar nuevos incidentes y exigir responsabilidades a los autores de este atentado”, tal y como ha anunciado el Gobierno iraquí.
“Esperamos una rápida vuelta a la normalidad en las relaciones entre Irak y Suecia”, concluyó.
Los manifestantes que atacaron la Embajada incendiaron las instalaciones en protesta por la quema de ejemplares del Corán en Suecia, lo que elevó la tensión entre ambos países.
El Gobierno iraquí decidió este jueves retirar a su encargado de negocios de Suecia y pedir a la embajadora del país nórdico abandonar Bagdad en protesta por la quema de ejemplares del Corán en Estocolmo.
El Ejecutivo iraquí también condenó y se comprometió a castigar a los responsables del incendio de la pasada noche en la delegación diplomática sueca.
Suecia calificó hoy, por su parte, de "inaceptable" el ataque contra su embajada en Irak y anunció que convoca al representante diplomático iraquí en Estocolmo.