Expresidentes conservadores dicen que decisión de Lasso “permite una salida democrática”

SANTIAGO DE CHILE. El Grupo Libertad y Democracia, integrado por presidentes y expresidentes conservadores de Latinoamérica y España, respaldó este miércoles la decisión del mandatario ecuatoriano, Guillermo Lasso, de disolver la Asamblea Nacional en medio de un juicio político en su contra.

Agentes de policía se despliegan en los alrededores de la Asamblea Nacional hoy, en Quito (Ecuador). Decenas de militares y policías han cercado la Asamblea Nacional de Ecuador, institución disuelta este miércoles por el jefe de Estado, Guillermo Lasso, al aplicar la llamada "muerte cruzada", por "grave conmoción interna y política". EFE/ José JácomeJosé Jácome
audima

El bloque, al que pertenece el propio Lasso, dijo en un comunicado que la medida “se enmarca dentro de las atribuciones que la Constitución le otorga” y “permite una salida democrática a la grave crisis política y de conmoción interna que vive el Ecuador.

“En virtud de las atribuciones que le otorga el artículo 148 de la Constitución Política del Ecuador, el Presidente Guillermo Lasso procedió hoy a disolver la Asamblea Nacional”, indicó el grupo, lanzado el pasado marzo en Santiago de Chile para contrarrestar la ola progresista que vive la región.

El comunicado está firmado por el chileno Sebastián Piñera, los españoles José María Aznar y Mariano Rajoy, el colombiano Iván Duque, el mexicano Felipe Calderón y el ecuatoriano Osvaldo Hurtado, entre otros.

En un mensaje a la nación, Lasso decretó este miércoles disolver la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, y convocar elecciones generales anticipadas, de modo que gobernará mediante decretos hasta que su sucesor asuma el cargo.

Lasso se ampara en un mecanismo legal conocido como “muerte cruzada” e hizo el anuncio el día después de haber comparecido ante la Asamblea para realizar su alegato de defensa ante la acusación formulada por la oposición por un presunto delito de peculado (malversación).

La “muerte cruzada”, contemplada en la Constitución de 2008, permite al mandatario conservador disolver el Parlamento en vez de esperar al segundo día de debate de la moción de censura, en la que se requieren 92 votos para destituirlo, equivalentes a dos tercios del hemiciclo.

El líder opositor y expresidente de Ecuador Rafael Correa (2007-2017) tachó de ilegal la decisión de Lasso, mientras que la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) denunció un “cobarde auto golpe de Estado”.

Lo
más leído
del día