La reunión de la Fed generó grandes expectativas debido a que tenía que resolver un dilema, entre aumentar sus tasas y potencialmente alimentar la crisis bancaria, o mantenerlas a su nivel actual a riesgo de que la inflación se dispare.
El banco central estadounidense decidió elevar 0, 25 putnos su tasa de interés. La tasa de referencias se ubicó en 5 a 5,25 por ciento.
Se trata del noveno aumento de los tipos en un año para combatir la inflación, aunque es menor que el anticipado por la Fed cuando todavía no había estallado la crisis bancaria.
Video: Qué es la tasa de interés
Pronóstica más alza
La autoridad monetaria estadounidense pronosticó que todavía serán necesarias más subidas de los tipos de interés para doblegar el alza de los precios y devolver la inflación al objetivo del 2 por ciento, publicó Europa Press.
A la hora de determinar el alza, se tendrá en cuenta el progresivo endurecimiento de la política monetaria, de los “efectos retardados” de la política monetaria sobre la actividad económica, la inflación y el sector financiero.
Además, la Fed asegura que “está preparada” para “ajustar” su política monetaria si “emergen riesgos que impidan la consecución de los objetivos del Comité”.
La Reserva Federal afirma que el “sistema bancario de los Estados Unidos es robusto y resiliente”. No obstante, también resalta que “acontecimientos recientes”, en alusión al colapso del Silicon Valley Bank (SVB) y el Signature Bank, conllevarán condiciones de financiación más estrictas tanto para las familias como para las empresas, y “tendrán un impacto en la actividad económica, en la contratación y en la inflación”.