Lempira es el nombre de un cacique hondureño lenca del siglo XVI que, según apuntes históricos, en 1537 murió luchando cuerpo a cuerpo contra los conquistadores españoles en un sector de lo que ahora se conoce como el departamento de Lempira.
LEMPIRA REPRESENTADO POR UN EXSOLDADO
Por su valentía, el cacique es considerado el primer héroe nacional del país centroamericano, y en su honor hay un departamento de los 18 que conforman el territorio hondureño que lleva su nombre, lo mismo que la moneda.
A mediados del decenio de los 70 del siglo pasado, el Banco Central de Honduras, para promover más la identidad nacional, sacó de circulación el viejo billete con el indígena con plumas, muy parecido a los estadounidenses, y lo sustituyó por uno nuevo con el rostro de un lenca, originario del departamento de Intibucá, en el oeste del país.
El rostro para representar al cacique Lempira fue el de José Serapio Gutiérrez, entonces un soldado de una unidad militar en el occidente hondureño, escogido entre muchos de varios cuarteles del país, que incluso participó en la guerra de 100 horas que en 1969 libraron los Ejércitos de Honduras y El Salvador por un centenario contencioso limítrofe y migratorio.
José Serapio, que ingresó al Ejército cuando tenía 18 años, según su relato, tiene en común con Lempira haber defendido en distintas trincheras la soberanía de su país y ser inmortalizados en la moneda nacional.
Muchos hondureños, principalmente de las nuevas generaciones, hasta ahora se están enterando de que el indígena que aparece en el billete de un lempira está vivo y que se trata de un veterano lenca que fue soldado de las Fuerzas Armadas.
Además, por relatos del mismo José Serapio, los hondureños han conocido que, una vez que fue escogido para hacerle la fotografía de perfil que sería plasmada en el billete de un lempira, le colocaron una peluca para que se viera con el pelo largo tirado hacia atrás, con una cinta decorada alrededor de su cabeza.
La idea de la fotografía con una peluca, en principio no le gustó a José Serapio, pero según dijo a los periodistas el miércoles en Tegucigalpa, después consideró que se trataba de "un privilegio", figurar en el billete de un lempira.
UNA PENSIÓN VITALICIA PARA JOSÉ SERAPIO
José Serapio, de 71 años, es padre de seis hijos y se dedica en su comunidad a la siembra de maíz para subsistencia.
El miércoles estuvo en la Casa Presidencial por un reconocimiento oficial que le está haciendo el Gobierno que preside Xiomara Castro, a través de un bono social para personas de la tercera edad, además del mejoramiento a su modesta casa en Jesús de Otoro, en el oeste del país.
José Serapio fue recibido en la sede del Ejecutivo por la ministra de la Red Solidaria, Marisela Figueroa, quien dijo que la presidenta Castro le pedirá al Parlamento de su país que autorice una pensión vitalicia de 15.000 lempiras (unos 607 dólares) a favor del indígena lenca, de nariz aguileña.
Un emocionado José Serapio dijo escuetamente que había "entrado aquí", a la Casa Presidencial y agradeció a Xiomara Castro por tomarlo "en cuenta".
La ocasión fue propicia para que José Serapio posara para las cámaras, medio siglo después, también de perfil, mostrando el billete con su rostro. Ese billete, que al reverso muestra una imagen del parque arqueológico maya de Copán Ruinas, según el diario británico The Telegrafh es "una de las monedas más bellas del mundo".
Desde hace casi 50 años, el rostro de José Serapio circula todos los días de mano en mano entre los hondureños en el devaluado billete de un lempira que, después de equivaler a 50 centavos de dólar, en la actualidad representa menos de tres centavos del billete verde estadounidense.