Las tropas fronterizas paquistaníes comenzaron a construir el puesto de control en la Línea Durand, como se conoce la frontera creada tras un acuerdo entre los británicos y Kabul en el siglo XIX, a la altura de Muqbal, en la provincia oriental afgana de Paktya, según afirmó en un comunicado el portavoz talibán Bilal Karimi.
El islamista recordó que ambos países acordaron no construir instalaciones militares a lo largo de la Línea Durand, "pero ayer las fuerzas paquistaníes intentaron establecer un puesto", por lo que autoridades de los talibanes acudieron a "discutir" el asunto.
"Desafortunadamente, las fuerzas paquistaníes abrieron fuego, lo que causó bajas. También se produjo un intercambio de disparos, que puede haber causado bajas en el lado" de Pakistán, concluyó Karimi.
Desde el lado paquistaní, miembros de las fuerzas de seguridad, que pidieron el anonimato, aseguraron a Efe desconocer "el trasfondo" de la declaración de los talibanes, y que no parecía estar relacionado con otro incidente ocurrido el martes en la zona.
Según había adelantado el Ejército paquistaní en un comunicado, en ese choque a la altura del distrito de Kurram, en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, murieron tres soldados después de un intercambio de disparos con "terroristas" procedentes del lado afgano, que sufrieron "un gran número de bajas".
El Ejército de Pakistán condenó "enérgicamente" el "uso de suelo afgano por parte de terroristas para actividades contra Pakistán", y añadió que no permitirá que se repitan esos incidentes en el futuro.
Hace un año Pakistán aseguró que había fortificado su frontera de 2.640 kilómetros con Afganistán con la construcción de nuevos fuertes y la casi finalización de una valla con el país vecino, un anuncio que se producía pocas semanas después de que los talibanes tomaran el poder el 15 de agosto tras dos décadas de guerra.
Durante años, Afganistán y Pakistán se acusaron mutuamente de permitir el paso de insurgentes de un lado al otro de la frontera para atentar en suelo afgano o paquistaní. A pesar de las buenas relaciones entre los talibanes e Islamabad, los incidentes continúan.