En un encuentro con la prensa hoy en Marrakech, en el sur de Marruecos, Landberg subrayó que el objetivo es aumentar la capacidad de estos países contra la influencia o un retorno del EI.
La prevención, la lucha contra la financiación del terrorismo, la rehabilitación y reinserción de los combatientes terroristas extranjeros constituyen unos puntos necesarios "para lograr una derrota duradera del EI en la región".
El responsable estadounidense señaló que la derrota del Estado Islámico en Siria e Irak permitió "la liberación de más de 8 millones de personas".
Landberg, cuyo país copreside la cumbre ministerial de la coalición contra el EI que se celebrará mañana, también se refirió al peligro del grupo yihadista en Estados africanos, concretamente en países donde el control gubernamental es limitado.
El responsable estadounidense hizo hincapié en el "Africa Focus Group" creado por la coalición y que ha definido varias líneas de intervención, como mejorar la capacidad de los países africanos para prevenir el flujo de terroristas a través de sus fronteras y reducir los ataques transfronterizos.
También el grupo prevé reflexionar sobre cómo mejorar la capacidad de estos países de recopilar información biométrica, para que los terroristas no se escondan detrás de nombres o documentos falsos.
El responsable estadounidense expresó la preocupación de su país por el aumento de la actividad del EI en la región del Sahel y recordó que los ataques terroristas en el área de las tres fronteras del Sahel (Mali, Níger y Burkina Faso) aumentaron en un 43 % entre 2018 y 2021.