La asesina, Savannah Brockhill, es la pareja sentimental de Frankie Smith, la madre de la pequeña Star Hobson, quien quedó absuelta de ese delito por el Tribunal de Bradford Crown aunque ha sido acusada de "ocasionar o permitir la muerte" de su hija.
Star fue trasladada a un hospital el 22 de septiembre del pasado año desde el piso donde residía con su madre en la localidad de Keighley, en West Yorkshire (norte del país), aunque sus lesiones resultaron "absolutamente catastróficas" e "insuperables", según apuntó durante el proceso judicial la fiscalía.
Al parecer, familiares y amigos de Smith habían expresado sus crecientes temores por el bienestar de la bebé ante la aparición de moratones por el cuerpo de la pequeña meses antes de su asesinato y remitieron varias quejas a los servicios sociales.
En cada denuncia, Brockhill y Smith lograron convencer a los trabajadores sociales de que las marcas que presentaba la menor se habían producido de manera accidental y que las quejas procedían de personas maliciosas que no aprobaban su relación homosexual.
Se prevé que este miércoles la jueza dictará las condenas de Brockhill y Smith.
David Fawcett, abuelo de la madre de la niña, indicó hoy a medios locales que su nieta, Frankie Smith, era "coaccionada, acusada y abusada" por su pareja y que se trata de un "caso clásico de lavado de cerebro".
Por su parte, las agencias de menores de Bradford emitieron un comunicado conjunto para "lamentar profundamente" no haber advertido "las señales de alarma" en este trágico suceso y asegurar que han puesto en marcha medidas con las que "mejorar" sus prácticas y aprender lecciones.
Los veredictos se conocen cuando hace apenas quince días otro tribunal británico declarara culpable a Emma Tustin, la madrastra de otro niño británico, Arthur Labinjo-Hughes, de seis años, a quien asesinó con la connivencia de su padre, en otro caso de maltrato infantil que ha ocasionado conmoción en este país.