Mirá el video del emotivo reencuentro de Nelson Haedo con su familia

Luego de varias horas de viaje desde Alemania, la esposa de Nelson Haedo Valdez, Tynka Mescheder, y sus hijos: Samuel, Noemí y Leonie pisaron tierra paraguaya. El León Guaraní se confundió en un efusivo abrazo con sus familiares que llegaron ayer para verlo jugar su partido de despedida del fútbol profesional. Pero la más pequeñita, Leonie, fue la más emocionada por volver a ver a papá Nelson.

Nelson Haedo ya disfruta de su hermosa familia que llegó desde Alemania.Instagram/Tynka Haedo Valdez
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Nelson Haedo Valdez ayer vivió un momento muy tierno al reencontrarse con su esposa, Tynka Mescheder, y sus chicos: Samuel, Noemí y Leonie, en el aeropuerto Silvio Pettirossi. Su familia se encontraba en Alemania y vino para acompañarlo, y estar en primera fila, en el encuentro de su despedida del fútbol profesional, que será este sábado 18 de diciembre, a las 19.00, en el estadio Defensores del Chaco.

Felices tras el reencuentro, Tynka y Nelson Haedo Valdez. (Instagram/Nelson Haedo)

“Mi equipo completo”

“Por fin llegó mi equipo completo. Solo falta Indio”, expresó Nelson Haedo Valdez en sus redes sociales, refiriéndose a la llegada de su linda familia, y la ausencia de su hijo perruno. Luego, continuó: “Gracias Dios todopoderoso por tenerlos conmigo”.

Un romántico Nelson aguardó a Tynka con un ramo de rosas rojas. (Captura de la historia de Instagram de Nelson Haedo)

El León Guaraní llegó al Silvio Pettirossi con un ramo de rosas rojas para su amada Tynka. Y estuvo con una gran sonrisa aguardando que su esposa y sus hijos salieran de la zona de desembarque.

Leonie, pura ternura

A juzgar por el video del reencuentro familiar que Nelson Haedo compartió con sus seguidores, la más ansiosa por dar un abrazo a papi fue Leonie, quien acaba de cumplir tres añitos. En el audiovisual se ve a Leonie corriendo y gritando “Papá”, para luego confundirse en un efusivo abrazo con el León Guaraní, que casi terminó en el suelo. Inmediatamente se sumaron a los abrazos sus hijos mayores Samuel y Noemí, y su amada Tynka.

Y mientras papá Nelson y mamá Tynka se daban un beso, Leonie se mantuvo cerquita, como pidiendo nuevamente la atención de su papá, quien no dudó en alzarla en sus brazos para seguir llenándola de mimos.

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