El orégano (Origanum vulgare), fue planta sagrada de los pueblos antiguos. Los hindúes la consagraron a Siva y los egipcios a Osiris. Los griegos perfumaban sus cabellos y cejas con pomadas de orégano. Durante el Renacimiento –época en que aparecieron los grandes jardines de hierbas- las mujeres lo plantaban en macetas para perfumar ambientes y para hacer dulces.
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La planta de orégano, también llamada mejorana silvestre, es un arbusto de 40 a 60 cm de altura que puede llegar a vivir 5 años. Sus hojas son pequeñas, de color verde oscuro, con vello en los bordes y muy perfumadas. Nacen de dos en dos en cada nudo, enfrentadas. Florece en verano y las flores son de color rosado o púrpura y dispuestas en racimos frondosos. Es una planta muy fácil de cultivar, aromática y decorativa.
Usos culinarios del orégano
Su sabor es ligeramente amargo; el orégano de buena calidad puede llegar a entumecer la lengua. Sin embargo, las variedades comerciales a menudo poseen un sabor menos intenso.
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Es el ingrediente imprescindible de la cocina italiana, donde es utilizado para la salsa de tomate, las verduras fritas y la carne a las brasas y, por supuesto, la pizza. Combina eficazmente con las aceitunas y alcaparras, y armoniza incluso con los platos picantes. Junto con la albahaca, esta hierba es la que le da el carácter a la gastronomía típicamente italiana.
Las cocinas de otros países mediterráneos utilizan esta especia en menor medida, aunque es de relativa importancia en la española, francesa y griega. En México también se utiliza para condimentar numerosos platillos como el el chile y el pozole.
Queda perfecto en ensalada con pastas frías. un ejemplo sería: fideos tipo macarroni, cocidos y fríos; pechuga de pollo o lomo de cerdo cocido y cortado en tiritas; tomates cherry; pepinos agridulces en trozos; queso Paraguay desmenuzado; hojas de albahaca picaditas. Condimentar con aceite de oliva, vinagre, sal, pimienta negra de molinillo y espolvorear con orégano fresco o seco.
Usos y aplicaciones del orégano
Se suele usar seca más que fresca, en platos de sabor intenso en los que predominan ingredientes como pimientos, ajo, tomates, cebollas y vinos.
Es excelente para aderezar ensaladas, carne picada, pastas y arroces. Además, puede entrar en la composición –junto con el perejil y el ajo- de rellenos para legumbres, carnes o tartas.
Combina muy bien con el tomate, por lo que resulta ideal para platos elaborados con su salsa, como las pastas y las pizzas.
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Las hojas frescas son muy útiles para ensaladas, guisos (se añaden hacia el final de la cocción), sopas, salsas, patés y platos de aves.
Propiedades del orégano
Sus propiedades han sido ampliamente estudiadas, siendo las más importantes su actividad antioxidante, antimicrobiana y también se la considera tónica y digestiva.
En infusión, el orégano ayuda a las alteraciones digestivas, bronquitis, tos y asma.
Muy utilizado interna o externamente en tratamientos de afecciones respiratorias con tos, pues posee acción expectorante.
El agüita de orégano combate los gases y tiene propiedades sedantes digestivas.
La infusión de 20 gramos por litro de agua (dejándola reposar 10 minutos) y tomando 2-3 tazas al día, se usa para aliviar la tos y el asma.
En menstruaciones dolorosas, se emplea como calmante y regulador.
Antiséptico de las vías respiratorias, Los dolores y reumas se alivian con friegas con aceite de orégano y cataplasmas de la planta.