La mala calidad del aire y los encuentros sociales facilitaron la aparición de molestias evidentes a nivel respiratorio. El Dr. José Alfredo Oviedo Villalba, neumólogo, jefe del Servicio de neumología del Hospital Central del IPS, hizo un breve análisis de la situación.
El aumento de cuadros respiratorios en las últimas tres semanas se debe en algunas personas a los virus circulantes: influenza A y B, covid y en niños menores de 2 años menores el virus sincitial respiratorio. Se presenta en recién nacidos hasta los dos años, según el especialista.
“La mala calidad del aire incide en presentarnos cuadros pseudogripales, en procesos inflamatorios secundarios a material suspendido en el aire en el medio ambiente”, dijo el experto.
Estas quemas producen cuadros similares a una influenza: tos, congestión, conjuntivitis (en ojos). También hay que entender que estamos todavía en etapa de invierno y con temperaturas muy oscilantes, por debajo de 5 ºC en algunos días y en los siguientes 3 por arriba de los 30 ºC.
“Estamos resguardados, hacinados por el frío y esto propicia la circulación viral. Salimos a la calle, nos reumimos, subimos al transporte público, vamos a la escuela o al trabajo y propagamos el virus”, alertó.
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Mala calidad del aire: ¿cuándo hablamos de virus?
El neumólogo especificó que cuando hablamos de influenza viral lo ideal es acudir al médico, quien determina el tratamiento según los síntomas y en algunos casos luego de hacer el hisopado para determinar el tipo de virus.
Solo entonces se sabe si es influenza tipo A, B o covid para actuar como es debido y acortar el ciclo viral, evitar la internación y llegar a terapia intensiva.
Mala calidad del aire: la mejor protección
La vacuna es importante porque nos resguarda de las formas graves especialmente a las personas con patología de base, los adultos mayores, niños, mujeres embarazadas y personas en situación de calle, indicó el galeno.
El uso de mascarilla evita casos de virosis, y el tipo N95 se aconseja cuando estamos en alerta naranja, roja por la quema de pastizales, basurales, bosques.
Deben usar mascarillas siempre que amerite
- Los pacientes respiratorios con alguna comorbilidad.
- Deben usar mascarilla los pacientes cardiacos.
- Con hipertensión.
- Personas con inmunosupresión, débiles en su sistema inmunitario.
Distintas situaciones nos llevan a estar hacinados:
- Personas que utilizan transportes públicos.
- Trabajadores en oficinas.
- Niños en salas de clase.
- Reuniones sociales, cumpleaños, etc.
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Medidas para no empeorar
El Dr. Oviedo Villalba sostiene que “la primera medida es una consulta al médico tan precoz como sea posible. Y va de la mano el uso de tapabocas de tal manera que protejan a su entorno, compañeros de trabajo y familia”.
Hay que aprender de lo vivido en la pandemia que nos enseñó a que hay que lavarse las manos, guardar distancia, evitar la aglomeración, recalcó el médico.
“Es necesario cuidar el medio ambiente y estar alertas a los síntomas. A los niños hay que llevarles rápidamente porque en poco tiempo pueden pasar de un estado leve a descompensación”, declaró.
Cuando estamos afectados el especialista conseja:
- Buena alimentación.
- Hidratación.
- Vida activa con ejercicios que no sean extenuantes.
- Moverse, caminar cuando las condiciones climáticas permitan.
El reposo
En los cuadros virales el reposo será superior a tres días para controlar a las 72 horas a ese paciente.
En algunos casos el reposo será entre 5 a 7 días.
El reposo no es para que el paciente salga y haga compras en el supermercado, el enfermo necesita estar descansado.
Con malas condiciones del aire puertas y ventanas se abrirán 15 minutos al día. El resto del tiempo mantener todo cerrado para que los ambientes internos estén más limpios.
En condiciones saludables del aire hay que generar la ventilación completa de la casa.