Las investigaciones sobre nutrición realizadas durante las últimas dos décadas han revelado que la salud intestinal es fundamental para muchas afecciones de salud (ya sea directa o indirectamente) y un intestino no saludable puede contribuir a una amplia gama de problemas y síntomas de salud, y afectar el control de peso o en la capacidad de perder peso, refiere la Lic. Carolina Sosky.
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En los últimos años, la conexión entre la digestión y la pérdida de peso ha ganado cada vez más atención a medida que los científicos profundizan en la comprensión de la compleja relación entre el intestino y la salud general.
“Cuando el intestino está desequilibrado o comprometido, puede provocar diversos trastornos digestivos como estreñimiento, hinchazón o síndrome del intestino irritable (SII). Además, un intestino o una dieta poco saludables pueden afectar la regulación de ciertas hormonas, incluidas las involucradas en la regulación del apetito. Esto puede provocar un aumento de los antojos, comer en exceso y dificultades para mantener un peso saludable”, explica la Lic. Carolina Sosky.
Algunas pautas para mejorar la salud intestinal serían realizar cambios en el estilo de vida. La mayoría de los problemas de salud son causados por malas elecciones de estilo de vida, como fumar, beber alcohol y comer demasiada comida poco saludable, sostiene Carolina Sosky quien recomienda incorporar ingredientes más saludables a las comidas, como verduras, nueces y frutas frescas.
Los trastornos digestivos como la dispepsia o indigestión suelen ser causados por comer en exceso, o tener atracones de alimentos que aportan calorías vacías, como los dulces, por lo que es esencial que eliminar estos malos hábitos para mejorar el proceso de digestión.
Dieta recomendada para una digestión saludable
- Es importante consumir alimentos ricos en fibra como cereales integrales, porotos, brócoli y lentejas.
- Evitar gaseosas, chocolates, cigarrillos y el alcohol para reducir la aparición de acidez.
- Limitar el consumo de alcohol a 1 o 2 vasos al día y mantenerse siempre hidratado bebiendo al menos ocho vasos de agua al día.
- Seguir un horario de alimentación, con comidas pequeñas y frecuentes a lo largo del día y evitar saltar el desayuno.
Aumento del consumo de fibra
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Los alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras, cereales integrales y legumbres, nutren las bacterias intestinales beneficiosas. También ayudan a regular las deposiciones, previenen el estreñimiento y promueven la sensación de saciedad, lo que ayuda a controlar el peso.
Limitar los alimentos procesados y el azúcar
Los alimentos altamente procesados y el exceso de azúcar pueden alterar la microbiota intestinal, promover la inflamación y contribuir al aumento de peso y la obesidad. Optar por alimentos integrales y no procesados y limitar los azúcares añadidos puede ayudarle a mantener un intestino sano y alcanzar objetivos de pérdida de peso.
Cuidar la microbiota
Las bacterias buenas de nuestro intestino tienen un impacto directo en nuestra capacidad para perder peso. El
microbioma intestinal puede ayudar o causar resistencia a la pérdida de peso y esto abre la posibilidad de intentar alterar el microbioma intestinal para impactar la pérdida de peso.
Consumir más probióticos
Los probióticos como Lactobacillus y Bifidobacterium que se encuentran en el yogur, el kéfir, el tempeh y más son las bacterias buenas que pueblan el intestino.
Aumentar el consumo de prebióticos
Los prebióticos son las fibras que hacen precisamente eso: actuar como combustible para alimentar los probióticos en el intestino. Agregar durazno, alcachofas, almendras, pistachos y legumbres, además de alimentos ricos en polifenoles como arándanos, frutillas y manzanas para obtener una buena dosis de prebióticos.
Limitar los alimentos bajos en nutrientes y altamente procesados
El mayor problema con los alimentos procesados es que carecen de varios nutrientes, incluida la fibra que alimenta a las bacterias intestinales, y pueden estar llenos de azúcares agregados, sal y sustancias artificiales. edulcorantes y/o aditivos y conservantes.
El microbioma se nutre de una diversidad de fibras dietéticas y polifenoles de una variedad de coloridas frutas, verduras, cereales integrales y otros alimentos vegetales frescos y ligeramente procesados. Eso no quiere decir que deba evitar todos los alimentos procesados; hay muchas opciones saludables que facilitan una alimentación saludable. Ser exigente puede ayudar a eliminar las opciones menos saludables.
Suplementos para la salud intestinal y la pérdida de peso
Además de los cambios en la dieta, ciertos suplementos pueden ser beneficiosos para mejorar la salud intestinal y favorecer la pérdida de peso. Sin embargo, es importante trabajar junto con un profesional de la nutrición antes de comenzar con cualquier suplemento nuevo.
Probióticos: los suplementos probióticos pueden ayudar a restablecer el equilibrio de las bacterias beneficiosas en el intestino, mejorando la digestión y reduciendo la inflamación.
Enzimas digestivas: las enzimas digestivas ayudan en la descomposición de los alimentos y mejoran la absorción de nutrientes. A menudo pueden ser útiles si tiene un trastorno digestivo o lucha contra deficiencias de nutrientes.
Suplementos de fibra: si resulta difícil satisfacer las necesidades diarias de fibra solo a través de la dieta, los suplementos de fibra pueden brindar apoyo adicional para la salud intestinal y la pérdida de peso.