Hay fundadas razones por las que no deberías frotarte los ojos cuando te pican. Y -por suerte- también hay alternativas saludables para lidiar con la picazón.
Riesgos de Frotarse los Ojos
1. Daño en la Córnea
Frotarse los ojos con frecuencia o con demasiada fuerza puede deformar la córnea, la capa frontal transparente del ojo, llevando a una condición conocida como queratocono. Esta deformación puede distorsionar la visión y en casos severos, puede requerir tratamiento quirúrgico para ser corregida.
2. Infecciones
Las manos están constantemente en contacto con superficies que pueden estar cargadas de bacterias y virus. Al llevarlas a los ojos, existe un riesgo elevado de trasladar estos microorganismos a una zona donde pueden proliferar fácilmente, causando infecciones como la conjuntivitis.
3. Aumento del riesgo de enfermedades oculares
Frotarse los ojos puede aumentar el riesgo de desarrollar glaucoma, una enfermedad que daña el nervio óptico y puede llevar a la pérdida de la visión si no se trata adecuadamente. La presión ejercida al frotar puede aumentar temporalmente la presión intraocular, factor de riesgo para el desarrollo de esta enfermedad.
4. Desgaste en la piel
La piel alrededor de los ojos es especialmente fina y delicada. Frotarse los ojos regularmente puede causar desgaste y acelerar la aparición de arrugas y líneas finas en esta área.
Alternativas para aliviar la picazón en los ojos
Si te enfrentás a la molestia de ojos picantes, considerá estas alternativas para aliviar el síntoma sin recurrir a frotarte:
- Lágrimas artificiales: Utilizar gotas para los ojos sin prescripción puede ayudar a lubricar los ojos secos y aliviar la picazón.
- Compresas frías: Aplicar una compresa fría sobre los ojos cerrados puede reducir la inflamación y la picazón.
- Evitar alergenos: Tratá de identificar y evitar los alérgenos que podrían estar causando tu síntoma. Esto puede incluir polvo, polen, o el pelo de mascotas.
- Mantén una buena higiene: Lava tus manos regularmente y evita tocar tus ojos sin lavarlas antes, para minimizar el riesgo de infecciones.
- Consulta a un especialista: Si la picazón persiste o se acompaña de otros síntomas, como enrojecimiento o secreción, es importante consultar a un oftalmólogo para un diagnóstico adecuado y tratamiento.
Aunque pueda ser un acto reflejo frotarse los ojos cuando estos pican, es importante resistir el impulso para proteger tu visión y salud ocular. Adoptar alternativas seguras puede ofrecer alivio sin los riesgos asociados con el hábito de frotarse los ojos. Siempre que la molestia persista, la consulta con un profesional es la mejor acción a seguir para garantizar el cuidado adecuado de tus ojos.