El Paris Fashion Week encendió las pasarelas de la mano de Etam cuya colección primavera dejó sin aliento a los admiradores de la fina lencería europea.
Sedas, lúrex y tules convivieron en perfecta armonía con cordones, cadenas, canutillos y apliques varios que complementaban las sutiles y sensuales transparencias del underwear no apto para cardiacos. Los rosa viejo también encontraron su lugar en la cita con la moda.