En la comunidad científica, las altas capacidades y los problemas de aprendizaje se consideran “excepcionalidades”, por eso el término “doblemente excepcional”, pero el concepto clave para entender la doble excepcionalidad es la asincronía del desarrollo.
Un ejemplo de asincronía es cuando una niña que está en 2º grado puede leer en un nivel de 7º grado, escribir en un nivel de 3º grado y entender conceptos matemáticos en un nivel de 9º grado. Esta niña puede mantener conversaciones profundas con adultos y, a su vez, tener rabietas como alguien de 3 años. “Existe un mito, de que estos niños son muy sensibles, son vulnerables, se llevan mal con la gente y no saben jugar con otros niños. Cuando lo que en realidad están necesitando es un grupo de pares intelectuales, generalmente les pones con sus pares y desaparecen los problemas de relacionamiento”. nos comentó la experta.
Cómo sabemos si es un niño/a con Altas Capacidades
Según la especialista ya no se testea como antes (por medio del resultado del test de coeficiente intelectual), hoy se trata de observar a aquellos niños que estén por encima del promedio de su grupo de estudios y ya desde ese momento empezamos a hablar de Altas Capacidades. “Algunas veces lo ve la familia, otros los profesores y pediatras. Las características no consisten en una lista que vayamos puntuando; a veces puede que sean precoces, que hablen, conversen o aprendan rápido, quizás usen palabras poco comunes. Están abiertos a la imaginación y a las emociones del arte, cuestionan, preguntar con más frecuencia que el resto. A otros les gusta hacer las cosas por sus propios caminos, su pensamiento puede conectar de manera muy rápida”, dijo la PhD.
Paraguay y la niñez con altas capacidades
La enseñanza para chicos con altas capacidades no está reglamentada pero está en la ley de educación inclusiva (Art. 5 inc. B), aunque la realidad en nuestro país es que no sabemos muy bien donde están; “dependen de la Dirección General de Educación Inclusiva, donde llegan muy pocos pedidos de dictámenes y adecuaciones para educación de altas capacidades, apenas llegan los casos más importantes, por lo general se quedan en la esfera de la institución educativa”, señala Vuyk.
También está el mito que “adelantar” al niño afectaría su capacidad de desarrollo y relacionamiento. “Su niñez es esta, es la de un niño con altas capacidades, si queremos obligarle a que le guste algo que no, le vamos a hacer sufrir”, subrayó.
Entonces, ¿qué hacer ante casos como estos?. En comunicación via Instagram la Doctora fue realmente contundente al referirse a esta incógnita. “Lo primero es evitar frenarle y dejarle seguir a su ritmo. Si te pide que le muestres números, le mostras números, si te pide letras, mostrale letras, aunque en la escuela te digan que no lo hagas por que después se va a aburrir en clases, hacé oídos sordos, no hagas caso, esa es la receta mágica para matar el aprendizaje”, reflexionó. La nota completa la podes ver en la cuenta del Instagram de la 98.5 ABCFM.
Recordemos el caso de Giuliano, un niño paraguayo que a los 4 años ya había descubierto su vocación. A los 13 años estaba ingresando a una universidad local, sin la aprobación del bachillerato, ya que el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) no le permitió cursar por su corta edad. Mas tarde, con 16 años migró a EE.UU. para estudiar en una reconocida universidad de informática.
Finalmente, recordamos que la doctora fundó el primer centro para altas capacidades y creatividad en el Paraguay, donde trabajan en el desarrollo del talento desde la evidencia científica, de esta manera el famoso termino “esperá” que escuchan a menudo estos niños y niñas, sea cosa del pasado y de una vez por todas nos hagamos cargo y potenciemos esas altas capacidades. Después de todo, nuestra sociedad en verdad necesita de este grupo, por encima del promedio.