El sábado 7 de septiembre, Brasil conmemora su proclamación de Independencia Nacional y como todos los feriados del vecino país, los comerciantes del microcentro de Ciudad del Este están a la espera de la llegada masiva de turistas. En fechas festivas, los brasileños aprovechan para visitar la triple frontera y realizar compras.
En ese contexto, Aníbal Ojeda, titular de Atraci, refirió que los feriados brasileños representan un aumento en el movimiento vehicular y de personas recorriendo por las calles comerciales.
“En esos días siempre se vende un poco más. Además, este feriado tiene una particularidad, que cae sábado, un día en que generalmente entra más gente. Por eso, estamos esperanzados de repuntar nuestras ventas, al menos ese día”, refirió.
En cuanto al movimiento comercial, indicó que hasta la quincena de agosto vendían bien, pero que de esa fecha en adelante se reporta una merma, la que considera “normal” para esta época del año. Agregó que el periodo de “vacas gordas” se registra en invierno, especialmente para los que se dedican a comerciar prendas de vestir.
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”Entre agosto y septiembre es normal que baje el movimiento. Luego, a partir de noviembre, la situación empieza a mejorar, que se acentúa en diciembre y el periodo de vacaciones”, dijo.
Ofertar en reales es una ventaja
Sostuvo que la alta cotización del real con el dólar no ayuda mucho a los locales que tienen precios establecidos en la moneda norteamericana. En ese sentido, detalló que los trabajadores de la vía pública ofertan sus productos directamente en reales, punto que tienen a su favor al momento de concretar una venta.
“Cuando uno le pasa los precios en dólares, los brasileños se asustan al hacer la conversión a su moneda, por eso cuando preguntan precios les pasamos en reales, también para su comodidad”, contó.