Eran las 22:20 del sábado último cuando un hombre con una escopeta llegó al sector de urgencias del Hospital Regional de Ciudad del Este. El mismo habló con los funcionarios y estaba visiblemente alterado.
Cuando los trabajadores de la salud le preguntaron por qué estaba munido de un arma de grueso calibre, contó que su hermano fue baleado y que el autor amenazó con seguirlo hasta el hospital. El joven herido ya llegó sin signos vitales al centro asistencial.
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Los médicos pidieron a un efectivo policial que acompañaba a un reo herido que interviniera y lograse que el hombre deje de deambular por el centro asistencial con la escopeta.
El doctor Federico Schrodel manifestó que, si bien su intención era proteger a su hermano, no podía permitir que permaneciera en el lugar, debido al riesgo que eso implicaba. “Se suelen dar estos tipos casos los fines de semana o feriados. El temor de los médicos es que suceda algo más grave que tengamos que lamentar. Es lamentable ver que una persona esté con una escopeta en la urgencia”, expresó.
El Hospital Regional de Ciudad del Este es un centro de referencia regional que todos los días recibe a miles de pacientes, pero no cuenta con resguardo policial. Los fines de semana, recibe a una gran cantidad de heridos en accidentes o en riñas, que llegan con fracturas y heridas de arma de fuego o de arma blanca, muchos de ellos acompañados por familiares alcoholizados.