Tras dos días de intensa búsqueda, munidos de colchones inflables, espineles y tacuaras, los pobladores del barrio Che La Reina lograron encontrar el cuerpo de un niño que había sido arrastrado por las aguas del río Acaray. El cuerpo fue trasladado hasta la Base Naval de Ciudad del Este, para el procedimiento de rigor.
Según testigos, el cuerpo quedó atascado a una rama seca de árbol y fue localizado esta tarde por un grupo de vecinos que estaban haciendo la búsqueda, utilizando un colchón inflable.
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Como la zona del hallazgo tiene una pendiente muy pronunciada, recibieron apoyo de militares de la Base Naval del Este. Miguel Zelaya, quien dio con el cuerpo, explicó que en ningún momento cesó la búsqueda, teniendo en cuenta que no recibieron apoyo suficiente de las autoridades.
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Las compuertas de la represa Acaray permanecen abiertas, por lo que piden a los pobladores ribereños a tomar los recaudos pertinentes y evitar ingresar al cauce hídrico.
Desde la ANDE informaron que de acuerdo al protocolo de operación de las compuertas, el caudal del agua en el cauce hídrico irá aumentando gradualmente, hasta llegar al nivel programado por el despacho de carga.