La intervención fue encabezada por el fiscal Elvio Aguilera, con acompañamiento de los policías de la oficina regional del Departamento Antinarcóticos.
El arma incautada fue una escopeta calibre 12mm de la marca Maverick, de procedencia norteamericana, que estaba guardada en una habitación de la vivienda.
El allanamiento se llevó a cabo ante informaciones obtenidas de que en el lugar había sustancias estupefacientes prohibidas. Sin embargo, tras la verificación no se encontró la droga ilícita.
El fiscal Aguilera explicó que el arma quedó decomisada por la falta de documentación y anunció que pedirá a la Dirección de Materiales Bélicos (Dimabel ) informes sobre si está registrada.