El predio recuperado tiene una dimensión de 1.000 m2, colindante con una reserva forestal, y es de dominio municipal. La propiedad estaba ocupada desde hacía más de un año por tres familias que construyeron precarias viviendas en el lugar. La ocupación irregular fue denunciada por vecinos en la Municipalidad y el año pasado los invasores fueron notificados para abandonar el predio.
Ante el incumplimiento de la intimación, la jueza de faltas municipales, Sonia Medina, dictó una orden de desalojo y esta mañana una comitiva interinstitucional se encargó de expulsar a los ocupantes y de derribar las construcciones precarias.
El procedimiento se llevó a cabo con algunos incidentes provocados por otros invasores de una propiedad cercana.
La asesora jurídica de Catastro, Lidia López, indicó que igualmente constataron en el lugar que varios árboles fueron derribados y lamentó la falta de acompañamiento de la Fiscalía del Medio Ambiente en el operativo.