El crimen ocurrió dentro del pabellón Blanco del citado centro penitenciario, ubicado en el barrio Boquerón de esta ciudad.
Desde de la Comisaría Primera informaron que el hecho fue comunicado por un funcionario penitenciario y que no se pudo identificar al presunto autor del asesinato. Acudieron al lugar personal de Criminalística de la Policía, la fiscala de turno, Zunilda Benítez, y la médica forense Raquel Cáceres, quien diagnosticó como probable causa de la muerte “asfixia mecánica”. Igualmente, se detectó una herida cortante en la cabeza del infortunado.
Benítez habría sido condenado a cinco años de cárcel en marzo de este año, tras ser encontrado culpable por un hecho de extrañamiento de persona. Según los antecedentes, la víctima del hecho, una menor de edad, fue llevada bajo engaño hasta la ciudad de San Pablo (Brasil) supuestamente para trabajar. El viaje se produjo el 15 de mayo del 2018 con anuencia de los padres.
El acuerdo inicial fue que la madre del hoy condenado, María Antonia Benítez acompañaría a la adolescente. Sin embargo, en el lugar del embarque se encontró con la sorpresa de que no le acompañaría la mujer, sino su hijo Marcos Antonio Benítez. También se confirmó que el ingreso a Brasil se realizó en forma irregular, ya que la entonces menor no contaba con la venia judicial para el viaje.
Asimismo, durante el debate público se dio a conocer que a la afectada le prometieron pagar 800 reales de salario, pero apenas le pagaron 50 reales. A raíz de esta situación, la misma debió buscar otra fábrica, donde trabajó y ganó dinero para poder regresar al país.